Alfonso Merlos titula ‘Frontalidad’ su columna de La Razón de este 29 de julio de 2015. Arranca de esta manera:
No estamos ante un tratamiento de choque sino ante el planteamiento de una lucha larga, dura y difícil. Así lo entiende con razón el Gobierno de España, porque estamos ante un combate en el que nuestra nación aparece en la parte alta de objetivos del Estado Islámico, y en el que la civilización occidental está en la obligación ética de protegerse y responder a la barbarie yihadista.
Añade que:
La fisionomía del enemigo está mutando. El desplazamiento de los salafistas a las redes sociales ha de motivar con urgencia una multiplicación de los recursos en el campo de la guerra virtual. No sólo para detectar y frenar la captación y el reclutamiento de jóvenes con vocación de morir matando.
Y concluye:
Pero, en efecto, poco sentido tienen las estrategias reactivas si no funciona la anticipación y la prevención. Y aquí es clave involucrar al mundo árabe y musulmán.