La mala educación
progresa en el Congreso
nada adecuadamente,
pues no está para eso
la Academia pendiente
o templo de la mente
que diseñó Platón:
el parlamentarismo
docente, ay, en sí mismo,
de todos en unión,
podrá ser la ocasión.
Hay que darles plantón
a tanto pretendiente
que miente, miente y miente
con dolosa intención
sin lograr la pendiente
dolora e indolente
de la revolución…
que nos llevaría al cabo
de cabeza a rabo
y sin remisión
a la insumisión
sin otro menoscabo
que el de la inquisición.
Mejor estar
sin más pensar
que en la actual situación.
Punto y acabo:
¿Habrá una solución?
