Lo de este chico no tiene nombre. O sí. Sería una especie de político «miserable», que es cómo le calificó Alfonso Ussía, y también sería un hipócrita. Porque su extremismo de izquierdas le lleva a hacérsele imposible y una contrariedad de principios atacar al terrorismo yihadista, y por es habla de «atropello». Para el miserable Alberto Garzón el atentado ha sido un atropello y Ussía le rebana.
El milagro es que no escribiese «accidente de tráfico en Las Ramblas», pero aún está a tiempo, porque en lugar de agachar la cabeza, se dedica a sacar pecho de su valentía podemita.
Este 18 de agosto de 2017 así respondió a José María Íñigo sobre Alfonso Ussía:
Así piensa este sujeto. Tomen nota. pic.twitter.com/FDQThXyZNZ
— José María Íñigo (@josemariainigo) 17 de agosto de 2017
¿Se refiere a mi o al periodista-falangista faltón que no sabe cumplir el código deontológico del periodismo?
— Alberto Garzón (@agarzon) 18 de agosto de 2017