Fumará heroína, se emborrachará de pub en pub y tomará LSD (alucinógenos) en su sofá bajo la supervisión de su madre. Todo eso bajo la atenta mirada de los espectadores. El joven presentador holandés Filemon Wesselink ha desafiado con esta propuesta a todo un país conocido por su liberalidad con las drogas, y la reacción no ha sido discreta. Mientras desde el Gobierno busca la forma de procesarle, desde la productora del programa "Spuiten & Slikken" ("Chutarse y Consumir"), de la BNN, alegan que "sólo queremos tratar temas que son parte de la vida de los jóvenes".

Él se encargará sólo del "trabajo de campo" con sexo y drogas, mientras que la principal presentadora del show entrevistará a los invitados sobre el uso y el abuso de estas sustancias.

Desde el Gobierno tienen poco tiempo para actuar hasta que 10 de octubre, en horario nocturno, se estrene el programa. El portavoz del partido en el Gobierno, Pieter Heerma, advirtió que "es peligroso y puede expandirse como ejemplo, por lo que llevaremos el asunto al ministro de Justicia para que explique qué dice la ley sobre esto y los riesgos en los que incurre".

Mientras, el portavoz del Ministerio de Justicia, Ivo Hommes, declaró que no está claro si Wesselink podría ser procesado. La posesión de cualquier cantidad de heroína es ilegal, pero en la práctica la Policía no tiene recursos para perseguir a la personas con menos de medio gramo de este narcótico altamente adictivo.