Si las empresas van como van, no me extrañaría que el periódico se convierta en un artículo de lujo
¿Dónde quedan los quiosqueros con la imparable crisis de los periódicos en papel? «En lo que estamos trabajando ya desde desde hace tiempo: en introducir en nuestros puntos de venta otro tipos de productos que no sean en papel», asegura Enrique Fernández Marqués a Periodista Digital en conversación telefónica.
Tras años luchando por un cambio en las ordenanzas del Ayuntamiento, la Asociación de vendedores profesionales de prensa de Madrid (AVPPM) ha conseguido que los quioscos puedan ofrecer otra serie de artículos «atípicos» para paliar las pérdidas derivadas de la poca ventas de periódicos, que desde 2008 ha caído entre un 30 y un 40%.
A esta iniciativa se une la de coordinar a los quiosqueros para crear una tienda virtual, ConQ, en la que se pueden adquirir libros, productos electrónicos y hasta paté. Compras que pueden ser enviadas a casa –el coste depende del precio del producto–, o ser recogidas en el quiosco.
[ConQ] es una tienda virtual a la cual se han adherido 54 quioscos. Creo que es un proyecto que se va a ir extendiendo poco a poco, por necesidad. No [es para] vender periódicos, [aunque] sí vamos a tener libros, físicos, no para ‘ebook’. La entrada de nuevos productos va a ir complementando la caída paulatina que va a tener el papel.
Humanizamos internet de alguna manera. Cuando yo vendo una cámara, si un cliente tiene un problema, baja y se lo soluciono. No tiene que ir a correos. Ahí aportamos un extra. Se puede pagar en efectivo, con tarjeta, con paypal, o en efectivo en el kiosco o en el datáfono del kiosco, y no tienes que meter los números, que hay gente que le da miedo meter los números en internet.
Intentamos ser una tienda parecida a las tiendas de gasolinera, donde tengamos cosas de necesidad inmediata y alguna de capricho. Estamos generando futuro.
Los quioscos están reiventando su modelo de negocio mientras los periódicos impresos no aciertan qué hacer. Fernández apunta:
Están queriendo financiar la parte virtual con la parte física. En el fondo, son ayudas a empresas, no al periódico sólo en papel ni a los problemas que pueda tener con la distribución.
Están pidiendo ayudas para el papel, pero hablando con un jefe de distribución de El Mundo, me decía: «Ellos son la niña bonita y nosotros somos la niña fea, pero estamos sufragando [el papel] los gastos de Orbyt».
No debería haber ayudas, no están para que les ayuden sino para que los empresarios inviertan en lo que realmente crean. Parece que los empresarios han dejado de creer en la edición en papel. Si son empresas, que rentabilicen su producto y se acabó. Tendrán que reestructurarse.
Desde el principio de la crisis, esa que decía Zapatero que no estaba, en 2008, entre un 30 al 40 por ciento. Además los periódicos se han vuelto agresivos, con tal de sacar difusión «medio regalan» en grandes empresas colegios, lo que está perjudicando la venta en número en los puntos de venta. En casi todas las provincias, cuando no se regala el ABC, se regala El Mundo. Pero en Madrid capital no se está casi haciendo.
Si las empresas van como van, no me extrañaría que el periódico se convierta en un artículo de lujo, con la reducción de tiradas, quien quiera el periódico tendrá que pagar más. Le doy entre ocho y diez años para desaparecer. Y después quedará residualmente.