Un colectivo de lesbianas, gays, transexuales y bisexuales elabora manuales de educación sexual para menores

Adoctrinamiento zapateril en la cuenta atrás: Más sexo, menos matemáticas

Se habla alegremente de posturas sexuales en la que la mujer es sometida

Adoctrinamiento zapateril en la cuenta atrás: Más sexo, menos matemáticas
Sandía, vegetarianos, amor y sexo. EP

No importa el nivel de matemáticas, gramática o Historia que pueda tener un alumno. Lo que preocupa es que el estudiante se mueva como pez en el agua en el mundo de la sexualidad. Da lo mismo que no tenga la madurez suficiente, lo que importa es que empiece a manejarse con conceptos como orgasmo, homosexual, lesbiana o cómo usar adecuadamente el preservativo. Y todo esto en pleno debate sobre los recortes en la educación pública. Desde luego, nada alentador para el futuro de las nuevas generaciones. Y encima sin que los padres tengan conocimiento.

Lo cierto es que La Razón desvela el 3 de octubre de 2011 –Clases de sexo a los 12 años y sin permiso paterno- el modus operandi de estas clases de educación sexual y el contenido resulta devastador:

«Yo soy lesbiana. Ni tortillera, ni camionera, ni marimacho. Soy lesbiana». Es la presentación que ha preparado Nuria, una educadora de Cogam (Colectivo de lesbianas, gays, transexuales y bisexuales de Madrid), para la charla que va a impartir a unos alumnos de un instituto sobre sexualidad. El colectivo acude a las aulas para explicar la diferencia entre orientación e identidad sexual, el género y el sexo y hasta la diferencia entre transformista, travesti, transexual o «travelo». También incluye una explicación sobre prácticas (besos, caricias, masturbación, coito…), fantasías y sueños.

El guión de Cogam prevé debates entre los alumnos sobre temas diversos como: «¿En qué ha mejorado la vida de las personas desde que se ha aprobado el matrimonio homosexual?»

Se trata de un ejemplo sobre la educación afectivo-sexual a escolares y jóvenes españoles que llega a las aulas y que ha recopilado la plataforma de padres «Madrid Educa en Libertad» en un informe. De hecho, de acuerdo con sus datos el 93 por ciento de los institutos públicos (de 12 a 17 años) ofrece cursos sobre la sexualidad y en muchos de ellos se reparten preservativos a los alumnos.

La plataforma denuncia «la falta de control y la nula información» que se ofrece a los padres y pone como ejemplo algunos casos como los ocurridos el curso académico pasado. 

Pilar, una funcionaria sevillana, se enteró por su hijo de 4º de ESO de la información que estaba recibiendo en la hora de tutoría. «En el colegio público donde estudia les impartieron el taller ‘‘Forma joven». Primero empezaron a decirles a los niños que el hecho de que lleven pantalones no significa que sean hombres, que tienen que descubrir ellos mismos su sexualidad con el tiempo.

Estas son algunas de las imágenes explícitas que se utilizan para adoctrinar a los alumnos, como sucede con el programa «Forma Joven», que se imparte en institutos andaluces. Éstos son algunos de sus contenidos:

Homosexualidad
«La homosexualidad se ha dado siempre, en todas las culturas. La diferencia ha sido su aceptación social. Aquí ha dejado de ser considerada enfermedad de tratamiento psiquiátrico».

«Falsos mitos»
«De las mujeres homosexuales se dice que hay muy pocas. Pero simplemente es que no salen en los medios».

Posturas
«Las posturas en las que la mujer da la espalda al hombre son muy frecuentes: tumbados, la mujer abajo y el hombre encima, de costado, la mujer de rodillas y penetrada por detrás».

Anticonceptivos
«Hay chicos que no tienen reparos en presionar para que la chica tome la píldora anticonceptiva, aun cuando las relaciones no sean muy frecuentes, incluso la píldora del día siguiente, como si se tratara de un método anticonceptivo más».

 

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Autor

Juan Velarde

Delegado de la filial de Periodista Digital en el Archipiélago, Canarias8. Actualmente es redactor en Madrid en Periodista Digital.

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