El 26 de junio de 2012 el diario La Razón, dirigido por Francisco Marhuenda publico en portada que el PSOE iba a acogerse a un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que afectaría a 180 trabajadores. El día 22 el PSOE había presentado la documentación necesaria para aplicar el ERE ante Trabajo.
La información iba firmada por Esther Palomera y decía entre otras cosas:
«La Razón ha tenido acceso al documento en el que el PSOE comunica a la autoridad laboral la apertura de un ‘procedimiento de despido colectivo, de suspensión de contratos y de reducción de jornada’, así como la apertura del periodo de consultas con los representantes de los trabajadores. En él se prevén 186 bajas aproximadamente entre empleados de la calle Ferraz, la Fundación Ideas, los grupos parlamentarios y otros centros de trabajo».
La información tenía su ‘salsa’ si se tenía en cuenta la oposición radical del PSOE a la última reforma laboral que ahora iba aplicar, pero cuya flexibilidad ahora ayudaba al partido de la oposición:
«El PSOE podrá mantener parte de su plantilla gracias a algunos aspectos aprobados en la reciente reforma laboral. Es el caso de las reducciones de jornada hasta en un 42 por ciento de la plantilla, la suspensión de contratos por un tiempo determinado y la rebaja salarial».
Pero esa información está dando mucho más que hablar de lo que se esperaba, puesto que el PSOE consideró que la noticia de su ERE no debería haberse difundido, al ser noticia ‘privada’ (aunque viene siendo habitual en los últimos años que se hagan públicos los EREs de todas las empresas relevantes).
El 2 de julio El País aseguraba que la información había sido directamente filtrada a La Razón desde el mail de la ministra Fátima Bañez en una nota firmada por Amanda Mars.
«Un texto de dos páginas con los principales datos del ERE del PSOE fue enviado desde el correo de la propia ministra, Fátima Báñez, a un periodista al menos, según una copia de este mensaje al que ha tenido acceso este diario».
El 3 de julio El País en nueva nota de Amanda Mars, ahora en compañía de Soledad Alcaide, matiza que aunque fue mandado desde el mail de la ministra Bañez, la responsable fue una asesora de la ministra, la vocal Paulina García Piñeiro.
El secretario de organización del PSOE, Óscar López, exigió la dimisión de Fátima Bañez por la ‘filtración’ a La Razón y anunció que demandaría a la ministra a la Agencia de Protección de Datos, aunque va a tener difícil demostrar la acusación a menos que El País explique a su vez la fuente que le ‘filtró’ el dato de que había sido Paulina García Piñero quién le pasó la información a La Razón.
