Concede una entrevista para que te llamen «pija de Jerez». No sabemos si a la candidata electa de Ciudadanos en Cataluña, Inés Arrimadas, le ha sentado o no el ‘cariñoso apelativo’ con el que le ha obsequiado su entrevistador en El País, pero está claro que no es el adjetivo más acertado.
¿Se imaginan el revuelo que se hubiera montado si esto mismo lo suelta, un suponer, el exalcalde de Valladolid, Francisco Javier León de la Riva, al que le cayó la del pulpo por lo de Leire Pajín o por llamar «señorita Pepis vestida de soldado» a Carmen Chacón?
Claro que Rubén Amón, el autor de la entrevista, lo que buscaba era darle un palo al líder del PP catalán, Xavier García Albiol, al que no duda en llamarle «bestia y portero de discoteca». ¿Habría hecho lo mismo, por un suponer, con Oriol Junqueras o David Fernández?
Este es el párrafo de la discordia en la entrevista publicada este 1 de octubre de 2015 en El País –Ni clon ni marioneta: lideresa-:
Urge aclarar que Inés Arrimadas no pretende sustraerse a sus responsabilidades ni entregarse al papel de chica mona e instrumental con que sus opositores pretendieron neutralizarla.
Empezando por el PP, cuyo candidato, Xavier García Albiol, parecía escogido en un casting como el antídoto «perfecto» a la Galatea de Albert Rivera. Hombre contra mujer. Agresividad contra candor. Autoritarismo contra sentido colegiado. Portero de discoteca contra la pija de Jerez laureada en Niza. La bestia contra la bella.
