Mucho tema catalán este 8 de enero de 2017 en las tribunas y editoriales de la prensa de papel. La sentencia alemana que impide a una región independizarse unilateralmente del país cae como un jarro de agua fría sobre las cabezas de los independentistas de Cataluña.
Sin embargo, antes de entrar en tan prolijo tema, pasamos a comentar la divertida columnas de Antonio Burgos en el ABC, donde le mete un buen palo al militar de Podemos, a Julio José Rodríguez, conocido más popularmente como Julio ‘El Rojo’:
Ese alto militar retirado que aspiraba a ministro de Defensa, que con las canas que peina y los trienios que devenga anda por ahí haciéndose fotos con un capullo puesto en el cañón de su pistola, el muy ídem. Las cabezas, ese es el problema de España: las Cabezas. (Pero no las del levantamiento constitucional de Riego, sino las faltas de riego sanguíneo…).
José María Carrascal asegura que prefiere ver a China convertida en primera potencia futbolística antes que en gran potencia económica o militar:
No sé a ustedes, pero a mí que China se convierta en la primera potencia futbolística me produce infinitamente menos miedo que verla convertida en la primera potencia militar y, algo menos, en la primera potencia económica, de lo que va camino.
Juan Pablo Colmenarejo está convencido de que la nueva bravata secesionista tampoco va a llegar a buen puerto:
El 17 de septiembre de 2017 podrá haber lo que los independentistas quieran. Pero nada más. Y tampoco se hallará con ese método la solución.
El editorial de El País le da una mala noticia a esos catalanes que buscan la independencia:
El Tribunal Constitucional de Karlsruhe ha dictaminado que en la Constitución federal de 1949 «no hay espacio» para que «los Estados individuales intenten separarse; esto viola el orden constitucional», por lo que un referéndum independentista, como propone el partido separatista de Baviera, sería ilegal.
La Razón también se fija en el mismo tema del palo a los independentistas catalanes:
Está claro que el independentismo catalán no encontrará nunca como aliada de sus pretensiones a Alemania. Esto sí, los nacionalistas bávaros emplean el mismo argumento para reivindicar su independencia («Baviera es el pagador de Alemania»), que los catalanes («España nos roba»).
Y el editorial de ABC va más allá:
Para muchos nacionalistas, empezando por la propia familia Pujol, Cataluña ha sido un gran negocio; y el nacionalismo, una burda defensa de los corruptos para esconderse tras el pueblo catalán.
Fernando Sánchez Drago revela en El Mundo los deseos que tiene para este año 2017, entre ellos que larguen al Papa Francisco:
Opté por tres deseos genéricos: que descienda el turismo, que los partidos euroescépticos ganen todas las elecciones venideras y que se largue o sea depuesto el Papa podemita.
