En los pueblos pequeños catalanes se ha producido una batasunización
Javier Barraycoa, prestigioso sociólogo y politólogo autor del best-sellers como ‘Historias ocultadas del nacionalismo catalán’ o ‘Doble abdicación. Juan Carlos I: ¿El hacedor de la III República?’, estuvo en los estudios de ‘Rojo y Negro’ de Radio4G la tarde de lunes 24 de noviembre, para responder las preguntas de los tertulianos sobre su última novela satírica ‘El último catalán’, publicada por Stella Maris.
El escritor presenta con humor ácido cómo serían las consecuencias de una Cataluña independiente del resto de España.
En la novela se describe cómo se consigue la independencia catalana por la debilidad de los gobiernos españoles conservadores y por la muerte de la política. A partir de entonces, la independencia es tan fácil como desprenderse de un tronco muerto.
El libro se adentra en una Cataluña en el año 2083 que conmemora el 50 aniversario de la independencia. Imaginaba el autor que en una ‘descatalanizada’ Cataluña, el catalán de toda la vida se siente perdido.
Este fue un proyecto del editor quien me hizo una propuesta de novela satírica para la cual me lancé con la página en blanco. Me preguntaba qué sería un catalán después de una posible independencia.
Javier Barraycoa, portavoz de la plataforma Somatemps, ha sido profesor de la Universidad de Barcelona durante 18 años y es director de estudios de Ciencias Políticas en la Universidad Abat Oliba CEU de Barcelona. Su reflexión se acerca mucho al sentir de muchos catalanes que viven hoy el auge del nacionalismo, y por ello, no quiso dejar de aportar su resumen político del nacionalismo:
Para que la tesis realmente preocupe al estado necesitan un millón más de votos. Por eso es importante reclutar a los inmigrantes. Hace unos años Carod-Rovira dijo que eran una minoría pero que los inmigrantes tendrían un papel muy importante en los próximos años.
¿Por qué decidió cambiar el registro al que acostumbra en sus ensayos y pasar a la sátira y al humor político? Javier Barraycoa quería aportar humor y desdramatizar el enquistado debate sobre el nacionalismo:
Acepté el reto de cambiar el registro a novela satírica para quitar dramatismo a la angustia que recorre Cataluña. Yo quería reírme de la propuesta catalana independentista. También muchos satíricos se han reído del catalanismo como el programa de ‘Polonia’, de forma que han popularizado el independentismo. Yo creo que ahí hay manipulación del humor. Pero yo he querido a través de la sátira reivindicar la importancia de dejar entrar aire fresco en el debate.
Los tertulianos coincidían con el autor al hablar del secuestro mediático que se ha producido en los últimos meses entorno al debate independentista, y lamentaban cómo afecta estos en las áreas más pequeñas de Cataluña.
En las grandes ciudades se puede ocupar espacios sin disgustos no nacionalistas. Pero en el mundo académico, el control independentista es absoluto, simplemente se anula el discurso. Sería inimaginable que en la televisión pública catalana me llamaran para hacer un debate como este. Se ha producido una batasunización en los últimos tiempos, sobre todo en los pueblos pequeños. Se regalan banderas esteladas en los balcones y esto aumenta la presión entre los vecinos. Hay que estar muy atento a ver cómo evoluciona.
También habló el autor de cómo previsiblemente en las próximas semanas se van ha producir importantes movimientos en algunos de los grandes grupos mediáticos. Planeta entrará con un 23% en el grupo Zeta.
Movilizarse cuesta mucho. La sociedad catalana es posmoderna e individualizada y cuesta reaccionar porque todo el ámbito mediático público está monopolizado y subvencionado. Lara quiere pasar como un gran empresario españolista pero siempre ha jugado a todas las manos. El grupo Zeta ha jugado a la ambigüedad absoluta. Esto podría ser una buena noticia para que por fin se posicione.
