Trabajar con De la Quadra-Salcedo es muy parecido a hacerlo con Pedrerol, es un aprendizaje constante, los dos son genios
El realizador Carlos Pecker, que actualmente trabaja en ‘El Chiringuito de Neox’ junto a Josep Pedrerol, fue el invitado de ‘El Burladero’ de ‘Rojo y Negro’ de Radio4G de este jueves 18 de diciembre de 2014.
En esta charla se hizo un repaso a la dilatada trayectoria de Pecker, que incluye una larga relación con la otrora Ruta Quetzal, que le ha permitido vivir intensas experiencias junto al que él considera uno de sus maestros: Miguel de la Quadra-Salcedo. Una de ellas ha sido la que ha reflejado en su último libro: ‘Perdidos en el Nevado Quehuisha’.
Pecker fue uno de los artífices responsables de poner en marcha a nivel creativo y técnico la gran mayoría de los programas de la época dorada de Intereconomía, como El Gato al Agua o Dando Caña: «Eché muchísimas horas allí. También el último año, aunque no valiera de nada, y a cambio me trataron como un perro», recuerda.
TITULARES MÁS RELEVANTES DE LA CONVERSACIÓN CON CARLOS PECKER EN ‘EL BURLADERO’ DE ROJO Y NEGRO:
La actual ruta BBVA, la que se llamaba ruta Quetzal, ha sido para mí la mayor alegría de mi vida
[La aventura que reflejo en el libro ‘Perdidos en el Nevado Quehuisha’] es un récord Guiness, subimos 85 héroes, fue impresionante y agotador el ascenso, el guía nos perdió a 9 grados bajo cero y estuvimos 26 horas subiendo y bajando a 5000 metros, me levanté titiritando, y después de 25 años pensé que ésta sería la experiencia para hacer el libro
Miguel de la Quadra-Salcedo ha sido mi maestro, después de mi padre [José Luis Pecker]. Para mí es como mi padre, me ha guiado, confió en mí, he hecho mil cosas con él y todo es un aprendizaje constante a su lado y ver su manera de pensar, es cómo trabajar con Josep Pedrerol, estar a su lado y ver su manera de pensar es un aprendizaje constante. Los dos son genios
No me llamó la radio. Siempre he estado detrás de las cámaras y los micros. Los programas que hizo mi padre en televisión, como ‘Un millón para el mejor’ le dieron más publicidad y le conocían por ello
De TVE recuerdo cosas buenas y cosas no tan buenas, recuerdo a algunos realizadores que fueron el germen de los que somos todos ahora. Pero en TVE se te caía un cable y no podías tocarlo, tenías que esperar a que viniera el que recoge el cable. Me acuerdo que un actor estaba llorando en una escena y se paró y tuvo que repetirse porque el de la grúa dijo: ¡Para que tenemos que comer!
Fui a la Guerra del Golfo para la agencia EFE, era la época que brotaban las autónomicas. Allí coincidí con Jaume Roures, que creo que estaba como productor de TV3. Era una persona fantástica. Me acuerdo que me dijo que había que conseguir ver el Atleti-Barça. El tío consiguió bajar la señal, yo era el que tenía la antena con unos guatemaltecos, la orientamos y ahí lo vimos todos los españoles.
De Intereconomía se me han borrado los malos rollos y recuerdo lo bueno, hacer programas de la nada. El ‘Gato al agua’ se empezó a conocer gracias a las críticas de Eva Hache. Tuvo una fuerza muy grande. Luego vino ‘Punto Pelota’. Hice ‘Dando Caña’, participé como crítico de cine con Esparza en ‘Con otro enfoque’. Fue una epoca divertidísima.
En Intereconomía eché muchísimas horas, aunque el último año no valieron para nada y encima me trataron como un perro. Recuerdo que el ‘Dando Caña’ de Algarra lo diseñamos en un pasillo en cinco minutos. Y fue muy bien.
Jamás digo que no y esto es una cosa que saben tanto Pedrerol como De la Quadra-Salcedo. […] Ambos son tan parecidos pero tan diferentes. Se parecen en la manera de pensar y en la manera de exigir. En lo que se parecen es que en los dos piensan que lo que tienen en su cabeza los demas lo sabemos como si fuera un libro abierto (risas)
La noche del despido de Intereconomía recuerdo que yo ya les había demandado porque me quería ir. Ellos no aparecieron en el juicio, ya buscaban una excusa. Esa noche cogí una cámara y cuando pasó todo lo de Pedrerol grabé todo. Un año después pusimos algunas imágenes en ‘El Chiringuito’, siempre de la calle, por no tener problemas si poníamos algo de dentro. El disgusto me duró cuatro días porque me llamó Pedrerol para decirme que contaba conmigo. Lo hablé con mi mujer y allá que me fui
En los especiales de Nochevieja subimos a una buhardilla. Me lo pasé bomba. Pero no falló nada, y eso no me gusta, siempre me gusta que haya alguna cosilla. Aquello salió francamente bien. Luego en el 15-M subimos allí a emitir e Intereconomía fue la cadena que más emitió aquello.Hubo mil movidas, nos pusieron a parir. Pero había que informar de lo que ocurría.