Trabajé con más libertad en la España de Zapatero que en la España de Rajoy. No conozco a nadie que haya sido más libre con Rajoy
La novelista y poeta Ángela Vallvey fue la invitada a El Burladero del martes 24 de marzo de 2015. A pesar de su trayectoria literaria, Vallvey ha sido y es una asidua a los medios de comunicación, tanto en su faceta como tertuliana como de columnista (actualmente lo hace para La Razón).
TITULARES MÁS RELEVANTES DE LA CONVERSACIÓN CON ÁNGELA VALLVEY EN ‘EL BURLADERO’:
Soy una intrusa y ejerzo el intrusismo en el periodismo porque yo no soy periodista
Colaboré con Juan Ramón Lucas y admiro en la gente las cualidades que me gustaría tener.
Una persona vale según el lugar en el que está. Creo que Onda Cero no es estrictamente Carlos Herrera
El sentido del humor es un arma estupenda para el columnismo, enriquece la visión. Es muy fácil es ser dramático pero buscar el lado humorístico, la ironía es más complicado. Si eres solemne, arriesgas poco
He practicado mucho la autocensura. La autocensura es la peor censura que existe. Cuando uno lo hace pasa un filtro tremendo en su cabeza, pero no es conveniente decir lo que uno piensa
En los tres últimos años desde que gobierna el PP veo en medios pánico al poder, porque el poder tenía miedo a las calles, miedo a perder sus puestos de trabajo. Y se pertrechó contra la opinión descontrolada. Ser libre es muy difícil
El frío aliento del poder contra la crítica se ha notado: no me digáis que no lo notáis vosotros
Trabajé con más libertad en la España de Zapatero que en la España de Rajoy. No conozco a nadie que haya sido más libre con Rajoy
Me echaron de todos los sitios, de Cuatro por ejemplo, me echaron en un mes de todas mis colaboraciones
No me gusta hablar de que fui desterrada, además tampoco soy tan importante, lo que ocurrió es que se cerraron filas como pasa en el juego de las sillas, y los que no pillamos silla, pues nos quedamos fuera.
TVE es pasto de luchas de poder político y eso perjudica, de siempre. Parece que todo es financiación pública pero que no consigue contentar a nadie. Es un campo de batalla de distintos intereses, estar allí es muy complicado, te rascas una oreja y hay alguien que se ofende
En el periodismo al dar la cara consigues enemigos, en cambio el lector es como un amigo que no conoces