Pablo Iglesias quiso convertirse en la tarde noche del 25 de febrero de 2015 en el líder de la oposición para dar réplica a Mariano Rajoy tras el Debate sobre el Estado de la Nación y retarle a un cara a cara donde y cuando quiera.
Al no tener aún representación en el Congreso de los Diputados, el líder de Podemos montó un ‘sarao’ en el Círculo de Bellas Artes, en Madrid, donde se dedicó a lanzar soflamas contra Mariano Rajoy. Eso sí, cuando los periodistas presentes en el acto quisieron preguntarle, Iglesias desapareció cual Houdini y el resto de dirigentes se fueron por la tangente.
El programa ‘Más Madrid’ (Telemadrid, 12:20 horas) dedicó varios minutos a hablar sobre el baño de masas que Iglesias se regaló para su mayor gloria. Alfonso Rojo, moderador de la tertulia, afirmaba con mucha chispa:
Yo les voy a decir lo que hay que hacer para ganar dinero y montar un buen negocio, comprar a Pablo Iglesias por lo que vale y venderlo por lo que él cree que vale a tenor de lo que nos dijo ayer.
Hermann Tertsch, columnista de ABC, dejaba claro lo que pareció la ‘performance’ de Iglesias:
¡Qué fatuidad!
Antonio Pérez Henares, director de Publicaciones del Grupo Promecal, se adhería a esa calificación:
¡Qué fatuo, qué fatuidad! Me pareció de un engolamiento tremendo y me vino a la cabeza una expresión del inefable ‘Butanito’ ‘¿Pero este qué partido ha empatado?’ El señor Pedro Sánchez le dio la réplica al señor Sánchez, unos pensaremos que con mayor o menor fortuna, porque es el líder de la oposición y para debatir con el presidente hay que ganarse el escaño en las urnas y este señor no se ha ganado el derecho a estar en el Parlamento ni a debatir con el presidente del Gobierno ni tan siquiera con el líder de la oposición.
Lo que tendría que hacer es debatir con Albert Rivera, pero no se atreve. Su discurso de ayer fue ridículo, de tramoya y me imagino que el cara a cara con Rajoy lo querrá con Cintora de moderador y con púlpito y alfombra. A éste le va a pasar lo que al lagarto de Jaén, que se hinchó, se hinchó y se hinchó y cuando explotó los cachos llegaron hasta Vigo.
Tertsch, al quite, añadía sobre el moderador de ese hipotético debate Rajoy-Iglesias:
O con el personaje ese que tienen en laSexta, que es una especie de alfombra de Podemos.
