¡Me alegro muchísimo de que tú te comprometas a que los nueve parlamentarios de Podemos acepten la disciplina de Podemos que estás imponiendo tú!
Pablo Iglesias, que últimamente se pasa la vida en los medios de comunicación, vlviendo al redil, apareció en ‘El Programa de Ana Rosa’ de Telecinco en la mañana de 30 de octubre de 2015 Empezó el choque de trenes con un tono especialmente amable y divertido entre sendos personajes, pero escondiendo detrás las primeras pullitas:
Aguirre: Hasta y puedo estar de acuerdo contigo en que la ley electoral hay que cambiarla. Tú eres profesor en la universidad […] ¿Crees que la soberanía reside en el pueblo español o en los territorios?
Iglesias: Muchísimas gracias por la pregunta, Esperanza, y te agradezco el tono. Creo que si habláramos así nuestra país ganaría muchísimo.
Aguirre: ¡Siempre hemos hablado así! Desde la primera tertulia en la que nos encontramos y te dije que había leído tu currículo y que militabas en el PCE desde los 14 años, y me alegro mucho de verte ahora tan moderado… —Esperanza Aguirre acorrala a Pablo Iglesias: «Repita usted conmigo: todos los etarras son unos asesinos»–.
Iglesias: ¡Genio y figura hasta la sepultura, Esperanza!
Aguirre: Lo mismo te digo, Pablo.
La cosa estallaría más adelante, con el líder de Podemos alzando la voz en su discurso político y la líder de la oposición en Madrid capital riéndose de lo que veía y escuchaba:
Contéstame a lo que te pregunto, ¿dónde crees tú que reside la soberanía del pueblo español? ¡Que no estamos hablando de la Merkel, Pablo! Como verdadero patriota, deberías hablar de Cataluña… Hemos demostrado que Pablo Iglesias es un maestro de contestar exactamente lo contrario a lo que se le pregunta.
Además, Aguirre, pilló a Iglesias en un renuncio, ya que el podemita aseguró primero con respecto al tema de ‘Sí que es Pot’ en el Parlament catalán que cree en la libertad de cada uno de sus nueve parlamentarios, para después asegurar que ninguno de ellos votará a favor del documento independentista de Carme Forcadell y compañía:
¿No has dicho que crees en la libertad de cada parlamentario de votar lo que quiere?
Y machacaba con un doble sentido:
¡Me alegro muchísimo de que tú te comprometas a que los nueve parlamentarios de Podemos acepten la disciplina de Podemos que estás imponiendo tú!