No ha sido el ejemplo más afortunado a la hora de hablar de que es necesario de que se le dé cancha y visibilidad a las protestas callejeras.
Juan Carlos Monedero, este 28 de octubre de 2016, era entrevistado en ‘Espejo Público’ (Antena 3) y en el transcurso del dúplex con Susanna Griso el fundador de Podemos establecía un símil tétrico, inoportuno y hasta errático cuando hablaba sobre la necesidad de que las protestas en la calle debían contar con la atención de los medios de comunicación.
La intervención ‘gloriosa’ de Monedero fue así donde equivoca el nombre de la joven desaparecida desde el 22 de agosto de 2016 en A Pobra de Caramiñal (A Coruña) y la ‘rebautiza’ como Miranda en vez de Diana:
Si no protestas, Susana, no saben que existes. Las estrellas que tienen nombre son las estrellas que existen, pero a las que no les ponen un nombre sabemos que están ahí, pero no sabremos de su existencia. Por tanto las protestas nos hacen saber que existen ese tipo de problemas.
Precisamente oía al principio de la conexión lo de Miranda Quer y todos deseamos que esa chica aparezca sana y salva. Le estáis dando visibilidad. Si le diéramos la misma visibilidad a la gente que hoy le van a cortar la luz o a la gente que la van a desahuciar o que no puede venir a la Universidad porque no puede pagar las tasas, a lo mejor tendríamos esa sensibilidad.
El resto de la entrevista la dedicó a todo tipo de improperios y exabruptos contra el resto de partidos. Sobre la formación de Mariano Rajoy comentó que:
El Partido Popular se está orinando en el regazo burocrático de todas nuestras instituciones. Un partido que ha ganado elecciones con dinero negro no puede llamar delincuentes a quienes se manifiestan en las puertas del Congreso.
Al PSOE, como era de esperar, le despellejó por su cambio de opinión:
La Cámara tiene que ganarse el respetando la voluntad de los españoles. El PSOE se presentó a las elecciones diciendo ‘no’ a Rajoy y se pasa la voluntad de los españoles por el arco del triunfo.
Y a Albert Rivera, tras el «gilipollas» a Pablo Iglesias, le dijo que no había sabido responder a la «elegante provocación» del líder de Podemos:
El papel de Albert Rivera ha sido triste.
