Un clásico de ‘Sálvame’ es hacer que un tertuliano desaparezca durante unos meses y después, por ‘sorpresa’, reaparezca en el plató del cortijo de Telecinco.
Raquel Bollo, que llevaba más de medio año alejada de la mirada catódica de Jorge Javier Vázquez, volvía el 29 de marzo de 2017 a sentarse en el programa vespertino y lo hacía como a ella más le gusta, con bronca.
A decir verdad, se lo pusieron fácil, ya que en la nómina de invitados para esa tarde estaba Rafa Mora, que había dicho de Bollo cosas no muy agradables.
Concretamente, el nuevo tertuliano de ‘Sálvame’ se había referido semanas atrás en estos términos sobre la ex de Chiquetete.
Para mí no fue un logro, sino una mancha en mi expediente. No es mi tipo y además no me beneficia para mis bolos que me relacionen con ella.
Bollo saltó a la yugular:
Lo que no te beneficiaba era hablar de una mujer como hablaste. La única diferencia es cuánto te llevaste tu de mí y cuánto yo de ti. Jugaste conmigo, porque a mí me pedías disculpas y aquí eras ambiguo y a mí eso es lo que me dolió. A pesar de todo, me quedo con el cariño y el recibimiento de mis compañeros. Yo sé a lo que he venido al programa.