Pelos de punta. Lágrimas. Emoción. Amaia nos hizo sentir eso y mucho más en la madrugada del 2 a 3 de enero de 2018, día de su cumpleaños. Su actuación se ha coronado ya como la más potente de la historia de ‘OT’.
Dejó el ‘City of stars’ que se marcó junto a Alfred a la altura del betún. ‘Amaia de España’ (Ya sí) salió del tópico ese que llaman zona de confort y se enfrentó a ‘Shake it out’, un tema lleno de oscuridad, luz y potencia. Una canción que ella llevó casi al Olimpo de lo épico. Amaia ya es adulta.
Un servidor, poco devoto de la nueva niña mimada de España, tuvo el impulso inmediato de escribir la crónica que nos ocupa. Ella sola, rodeada de velas, sin apenas moverse y dándolo todo. No sobreactuó, no hizo aspavientos ni forzó de más. Se abrió en canal y hasta Mónica Naranjo se levantó de su silla en mitad de la actuación.
No hubo valoración del jurado. No hacía falta. Y con ella, y ya en la gala 9, volvemos a recordar porqué ‘OT 2017’ nos ha devuelto la fe en la televisión en abierto. En una época en la que el consumo es bajo demanda y hace años, muchos años, que no vivimos un fenómeno social, estos chicos (que no arrancaron muy bien que digamos) han recuperado el significado de la palabra ‘estrella’.
El fenómeno se ha conseguido gracias a la conjugación entre la tradición del formato en sí con las nuevas tecnologías, con abrirse en canal a la interactividad y a la auténtica vida en directo.
Todo en ‘OT 2017’ es truquero, creado para eso, para funcionar pero al igual que este año en ‘GH Revolution’ todo lo que podía salir mal ha salido peor, los de Gestmusic han tenido suerte y han dado en la diana.
No todos los que cantan ahí son Amaia (ni si quiera ella). Los hay que siguen cantando mal y nadie les dice nada. Al igual que hay muchos que se han quedado en el camino. Para ellos, para los que no han llegado o fracasan, decir que esto es TV y en la TV la música (o el talento) no es tan importante. Excepto en esta última actuación de Amaia, por su puesto.
Y como le dijo Mónica Naranjo antes de que cruzase la pasarela:
Has estado sublime, apoteósica. La rehostia.
Increíblemente, Aitana ha sido la favorita del público. La última de esta edición. Casi mejor, así hay más emoción de cara a la final.
Y mientras escribo estas líneas, la mejor de las noticias: Cepeda, por fin, está fuera. Ya era hora. Hay esperanza. Feliz 2018.