Ocurría este pasado mes de julio en Telecinco. María Teresa Campos acudía a la cadena de Fuencarral a pedir explicaciones sobre un asunto y a reclamar otro. Quería verse directamente con el ‘capo’ Paolo Vasile.
Después de varios intentos y no pocos rifirrafes porque Vasile era reticente a mantener ese encuentro con su estrella finalmente ambos se vieron las caras.
Y la reunión no fue ni mucho menos cordial, más bien todo lo contrario. Según aseguran a Periodista Digital fuentes de Telecinco, los reproches marcaron el ritmo de la cita y Teresa Campos descargaba inmediatamente su munición: preguntaba acusadoramente a Vasile por qué se ha retrasado tanto la puesta en marcha de una nueva edición del reality Las Campos, un producto que sorprendía las pasadas temporadas veraniegas por su enorme éxito y aceptación.
Sin embargo ahora, sin motivo aparente, Mediaset tenía paralizado sine día el estreno de la nueva temporada, grabada en pleno invierno, y la matriarca del clan televisivo ha echado en cara que se vaya a estrenar ahora (Telecinco ha comenzado a emitir distintas promociones del espacio) y que los espectadores vean el desfase en el tiempo ya que las protagonistas –Teresa, Terelu Campos y Carmen Borrego– aparecen vestidas de pleno invierno y más aún con la dureza que ha golpeado este año el frío en Madrid.
El incomprensible retraso ha evitado que se grabe otra entrega con las andanzas veraniegas de Las Campos, consecuencia de ello pierden una oportunidad más de ingresos.
Pero lo realmente alarmante para María Teresa Campos se produjo en la segunda, y más importante, de sus reivindicaciones: la puesta en marcha de un programa para ella. Y en este punto Teresa solo ha encontrado las largas y negativas de Telecinco. No hay proyecto para quien fuera una de las reinas de la programación y estrella de la cadena.
Teresa Campos preguntaba directamente a Vasile sobre ‘qué hay de lo suyo’ y la respuesta del capo, según las fuentes consultadas, no pudo ser más contundente: «jubílate Maritere, disfruta de la vida y cambia el rol. Pasa de entrevistar a ser entrevistada».
Y, tal y como cuentan a Periodista Digital las mismas fuentes, la matriarca no se tomaba nada bien las palabras (y sentencia) de Paolo Vasile y la cita terminaba en gritos y palabras bastantes subidas de tono. Pero nada parece evitar que la jubilación de María Teresa sea ya prácticamente un hecho.