Mariano Rajoy ha presentado finalmente este 11 de febrero de 2016 en el Congreso su primer documento de 18 páginas con ofertas programáticas genéricas para negociar con los líderes de Ciudadanos y del PSOE.
Ha sido 53 días después de las elecciones del 20-D. Al candidato de Ciudadanos, Albert Rivera, se lo ha entregado en persona, este jueves, en su segunda reunión cara a cara tras los comicios. La primera cita fue a los pocos días de las elecciones.
Al secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, se lo ha enviado casi al mismo tiempo a su despacho a través de su gabinete, para que esté preparado ante su encuentro de este viernes y en una demostración más del grado de enconamiento personal y político que padecen ambos.
PP Y CIUDADANOS
Rajoy y Rivera mantuvieron un encuentro «cordial» en el que quisieron evidenciar sus puntos en común.
Incluso coincidieron en la posibilidad de una flexibilización del objetivo del décifit, como ya se ha hecho, en otras ocasiones, apuntó Rajoy:
«Y España cumplió, fue un país serio; ante eso, estoy seguro que la UE actúa con inteligencia».
Pero igual que el presidente en funciones subrayaba los encuentros, también marcaba las diferencias, en este caso con el PSOE de Pedro Sánchez, con quien se verá mañana en el Congreso:
«No sé exactamente a qué voy», sobre todo tras los reiterados «noes» de Sánchez a ese gran pacto de partidos constitucionalistas que Rajoy ve como única alternativa. Y frente a la cual, la de PSOE con Podemos y los independientes le parece «lo peor que le puede pasar a los españoles».
En todo caso, el mismo documento que presentó esta mañana a Rivera lo ha hecho llegar también a Pedro Sánchez, para que pueda haberlo estudiado cuando ambos se reúnan este viernes.
En él, se recogen los cinco grandes pactos que el PP ofrece: un Pacto de Estado por el crecimiento económico y el empleo -que incluya ampliar la competitividad de la economía, una ley de cambio climático, una Agenda Industrial, y compromisos con la economía digital y con el medio rural-; un Pacto para la reforma fiscal y la financiación de las comunidades autónomas -que plantee la financiación de una cartera común en servicios básicos-; un Pacto Social que «ponga el foco en los ciudadanos en mayor situación de vulnerabilidad»; un Pacto por la Educación -con especial atención a la Formación Profesional Dual, que se aplicaría también en pequeñas y medianas empresas-, y un Pacto para el fortalecimiento institucional -donde se incluyen nuevas medidas contra la corrupción como reforzar el control sobre los contratos públicos y las subvenciones, regular los lobbies, respuesta penal frente a los casos de corrupción, adecuar el régimen de aforamientos, y una reforma del régimen electoral-.
Rajoy no renuncia a plantear su propia investidura si consigue apoyos suficientes, «y no para marear la perdiz», confirmó que el líder de Ciudadanos no le ha pedido ni insinuado que deba dejar de ser el candidato del PP para llegar a acuerdos con él -«en absoluto me ha dicho nada relacionado con eso»-, y quedaron en volver a encontrarse el próximo martes, ya con equipos formados para negociar si así lo permite el calendario de investiduras -que debe fijar el presidente del Congreso, Patxi López, la próxima semana-.
