¿Y qué hacemos los ciudadanos cuando la Administración y los políticos no sólo no nos protegen, sino que nos roban y difaman?
Cuando los grapo secuestraron a Publio Cordón, era ministro de Justicia e Interior Juan Alberto Belloch. Desde muy pronto, la familia del secuestrado se quejó de que Belloch daba crédito a las versiones de los terroristas de que Cordón había aprovechado la ocasión para hacerse una nueva vida.
En una entrevista en ABC, en 1998, una de las hijas, Carmen, dijo:
Sabemos que el ministro hizo manifestaciones a periodistas diciendo: «Ése está por ahí, por el Caribe, con dos mulatas».
Unos años más tarde, la misma hija trató de explicar la razón del comportamiento de Belloch, el juez progresista:
En el libro, Carmen Cordón se muestra muy crítica con el actual alcalde de Zaragoza, Juan Alberto Belloch, que era ministro del Interior cuando su padre fue secuestrado. «Sentí orfandad», afirmó Carmen al explicar el sentimiento de la familia cuando, según ella, Interior filtraba informaciones que daban más credibilidad a las palabras de los grapos que a un empresario «normal» de Zaragoza, y que incluso hicieron dudar en un primer momento sobre la autoría del secuestro.
Esta actitud hizo a la familia «mucho daño emocional», según Carmen, quien atribuye al «momento convulso» que se vivía en España, con una «ETA que campaba a sus anchas», ese comportamiento del Gobierno, al que «solo le faltaba otra banda terrorista en activo».
Esa mentira sigue dando vuelta por las redes sociales, como podéis comprobar.
A veces uno se pregunta si los políticos tienen conciencia.