La bandera catalana ha sido el refugio de conductas indignas. Las comisiones depredan la actividad económica de Cataluña y generan unas maneras de hacer negocios que devalúan el futuro de los catalanes.
‘La pasta nostra’ (Editorial Sekoitia), el nuevo libro de Xavier Horcajo, director de los programas de Intereconomía TV ‘Informativo I’ y ‘Más se perdió en Cuba’, desgrana los 33 años del poder ‘convergente’ en Cataluña y detalla los casos de corrupción que han salpicado a la familia de Jordi Pujol.
El clan de los Pujol, el ‘nido del cuco’, CARIC, ICF y Planasdemunt, La casa Nostra, Casinos, Javier de la Rosa, el juez Pascual Estivill, los abrevadores de Duran i Lleida, Felip Puig y el ‘pinyol’ -núcleo duro de CDC-, Prenafeta y Alavedra, el caso Palau, Oriol Pujol y las ITV. También explica los errores que ha cometido el PP, como los indultos en el caso Pallerols, un favor que se hizo a Duran Lleida y Sánchez-Llibre, ambos diputados de CiU.
Desde hace 33 años, primero con los Gobiernos de Jordi Pujol, que llegó a ser el jefe de gobierno más longevo de toda Europa; luego los años de oposición con el Tripartito en el Gobierno y después con la reinstauración de Convergència i Unió en el poder y Artur Mas en la Presidencia, se han caracterizado por innumerables casos de corrupción arreglados de forma política.
A veces con apaños en los juzgados, en las fiscalías generales del Estado, a veces con indultos graciosos de los culpables condenados, a veces comprando sentencias y, las más, con apaños políticos para que los pillados -que son muchos- salieran indemnes. La bandera catalana ha sido el refugio de conductas indignas. Las comisiones depredan la actividad económica de Cataluña y generan unas maneras de hacer negocios que devalúan el futuro de los catalanes.
Con los años, la sensación de impunidad viajaba en los coches de consejeros y altos cargos de la Generalitat nacionalista, hasta que con la crisis, llegó el hartazgo de los ciudadanos por lo corrupto y por los corruptos. Y con él la amenaza de volar por los aires ese ambiente de coimas, dinero en paraísos fiscales, financiación inconfesable y parasitismo que preside la economía de Cataluña.
Este ensayo describe cómo el entorno de Jordi Pujol, el carismático líder nacionalista, siempre hizo negocios al amparo de la administración que dirigía. Sus hijos son multimillonarios, sin que puedan explicar a qué deben su fortuna, más allá de la sombra del propio Pujol.
TITULARES
«Es peor el delito de los nacionalistas que el de Bárcenas. Porque Bárcenas robaba al PP, pues allá el PP, pero estos roban dinero público. El dinero de los Pujol viene de comisiones, de licencias públicas y de negocios con la Generalitat».
«El nacionalismo es una especie de gas, que se expande y lo invade todo»
«Hubo una obsesión del nacionalismo por hacerse con el Fútbol Club Barcelona. Al final lo han conseguido con Sandro Rosell. Y no se conformaron con eso y ahora también tienen el Espanyol tras montar la candidatura».
«Yo trabajé en la emisora de radio en la que Enric Sopena era el jefe, entonces era del Opus Dei y estaba empeñado en llevarme con él de ejercicios espirituales, teníamos por eso una gran asintonía. Me llevé una sorpresa al enterarme que con el triunfo del PSOE se había convertido en socialista».
«José Antich fue nombrado director de La Vanguardia por Carlos Villarubí, que es un hombre de Convergencia. Entre Villarubí y el poder de Piqué, entonces ministro de Aznar, llevaron a Antich a la dirección de La Vanguardia. Antich es un gran navegante, ahora todos deben estar convencidos de que es convergente, pero lo que es, es un gran navegante, lo que toque».
«Justo Molinero es uno de los más beneficiados en el reparto de emisoras. Para negociar eso al lugar al que tienes que ir es ‘al Nido del Cuco’, que era el despacho de Jordi Pujol Ferrusola. Cuando la Generalitat tenía que comprar un edificio él era el hombre que se quedaba con la comisión. Si no pasabas por el Nido del Cuco era muy difícil que obtuvieras cosas de concesión pública».
«Xavier Vidal Folch (El País – Cataluña) es un pobre hombre. Le salvó de un proceso el abogado Piqué Vidal y luego el abogado se cobró el favor: Vidal Folch les dio mi cuello en bandeja. Afortunadamente hay leyes laborales que impiden los abusos».
«Conozco Josep María Sala, tío de Susanna Griso, que fue condenado por el caso Filesa y tengo que decir que antes y después de ir a la cárcel sigue viviendo en la misma casa, por eso el PSC le ha mantenido. Yo le respeto»
