Cinismo en estado puro, y más cara que espalda. Lo de este martes 16 de enero de 2018 en la Eurocámara, lejos de ser un lavado de imagen, ensucia aún más a la formación morada por su incoherencia y ganas de hacer el paripé, pese a las evidencias que los relaciona con el tiránico regimen iraní. De ello se ha encargado el barbudo de Miguel Urbán, quien hizo una intervención muy dura contra el país del ayatolá Jamenei. (Pablo Iglesias seguirá cobrando 3.000 euros al mes de los sanguinarios ayatolás iraníes).
Y es que el Pleno de la Cámara se debatía sobre la situación en Irán, inmerso desde hace semanas en una espiral de protestas contra el Gobierno de Hasan Rohaní por la subida de los precios y la corrupción, así como el peso de la religión en la vida política, y el eurodiputado -miembro de la Subcomisión de Derechos Humanos para más señas-, le salvó el pellejo a su jefe sin venir a cuento. ([VÍDEO X] Así ahorcan lentamente a un gay los amigos iraníes de Podemos).
De ello da cuenta Ana Isabel Martín en ‘EsDiario’, quien recuerda que Pablo Iglesias trabaja para el férrea República Islámica de Irán desde 2013, presentando semanalmente para la televisión Hispan TV la tertulia Fort Apache. Un trabajo por el que cobra unos 3.000 euros mensuales. De eso no dijo ni mu el mentado.
Urbán denunció asin despeinarse que desde el inicio de las protestas en la calle en diciembre
«la represión ha causado al menos 22 muertos y unas mil personas han sido detenidas, una represión que rechazamos enérgicamente».
Y añadió:
«Protestas de las clases populares iraníes ante las políticas neoliberales de un régimen autoritario que ha empobrecido a millones de personas. Una situación económica agravada injustamente por las sanciones impuestas por Estados Unidos y por la Unión Europea, cuyas consecuencias sufre como siempre la población civil».
«Desde aquí queremos dejar claro nuestra defensa a las movilizaciones populares, de sus reivindicaciones, de la libertad de expresión y de sus aspiraciones democráticas».
Se da la curiosa circunstancia de que las dos veces que la presidenta del Consejo Nacional de Resistencia de Irán y mayor activista pro derechos humanos del país, Maryam Rajavi, ha visitado el Parlamento Europeo, ningún eurodiputado de Podemos ha estado nunca para recibirla y escucharla.
