Desde que en 1979 Felipe González propuso al ‘viejo profesor’ Enrique Tierno Galván ser candidato socialista a la alcaldía de Madrid (lo que le conseguía dos premios en uno, la posibilidad de conquistar la capital y apartar a un inminente rival) los ‘fichajes estrella’ han sido constantes en Madrid.
Con el intento del PSOE de fichar a la actual alcaldesa, Manuela Carmena como candidata socialista para las elecciones de 2019 han superado con creces cualquier otra operación equivalente. Hasta ahora lo más discutible eran los ‘candidatos paracaidistas’.
Aquellos que no habían estado haciendo ningún tipo de oposición municipal y aparecían en campaña para ver si ganaban y, de no lograrlo, renunciar y no quedarse en el ayuntamiento.
Los ‘fichajes estrella’ en la derecha no dieron buen resultado. En 1983, Jorge Verstrynge, tras ser derrotado por el ‘viejo profesor’ renunció a su acta. Según Álvarez del Manzano forzado por él, según Verstrynge por acuerdo previo (ambos políticos dieron su respectiva visión de aquel suceso en sendas entrevistas a Periodista Digital).
El propio Verstrynge, con el acuerdo de la cúpula de Alianza Popular en Madrid de Carlos Ruiz Soto intentaron convencer a Manuel Fraga a que fuera candidato a la alcaldía de Madrid en un proyecto que se saldó con la defenestración del propio Verstrynge y Ruiz Soto por parte de un Fraga que vio en aquello una operación para derribarle.
Manzano lograría conquistar la alcaldía en 1991. No pudo evitar que algunos de sus concejales crearan escisiones (como su fiel Ángel Matanzo, cuyo partido no sacó nada).
Los experimentos ‘paracaidistas’ del PSOE
En 1997 el PSOE convenció a la feminista Cristina Alberdi de que se afiliara para que fuera candidata a la alcaldía, pero sus peleas con las ‘familias’ lo impidieron.
El segundo intento ‘paracaidista’ fue Cristina Almeida, la líder de Nueva Izquierda, tras ser expulsada de Izquierda Unida, fue fichada para ser candidata del PSOE a presidir Madrid en 1999 sin estar afiliada. Una operación que sentó como una patada a muchas ‘familias’ del PSOE madrileño. Al final Almeida no logró hacer nada contra Gallardón.
En 2003 la candidata ‘paracaidista’ fue Trinidad Jiménez, que sonaba con fuerza a la alcaldía de Madrid. Pero Aznar pasó a Gallardón de la comunidad a la alcaldía y este pudo derrotar a Trinidad Jiménez, que terminó renunciando a su acta para ser ministra de Zapatero. En la repetición de elecciones de octubre de 2003, Zapatero intentó que Gregorio Peces Barba fuera el candidato, pero la operación fracasó por la negativa del profesor.
En 2007 el PSOE volvió a intentar un ‘candidato paracaidista’. Tras una vacilada histórica de José Bono, se designó a Miguel Sebastián, que fue vapuleado electoralmente por Gallardón. Como ‘la Trini’, Miguel Sebastián renunciaría a su acta para ser ministro, lo que los concejales socialistas han aprovechado para cargar contra ‘los paracaidismos’.
En 2011 el candidato fue otro ‘paracaidista’ el ex secretario de estado de deportes Jaime Lissaveztky, que se saldó con otro fracaso.
En 2015 el PSOE optaba por Tomás Gómez para la presidencia y Antonio Miguel Carmona. Pero la dirección del PSOE de Pedro Sánchez decidió fulminar a Tomás Gómez poco antes de las elecciones y hacer un nuevo ‘fichaje paracaidista’ el de Ángel Gabilondo que, aunque no pudo ganar a Cristina Cifuentes, sí ha permanecido toda esta legislatura haciendo oposición.
Antonio Miguel Carmona fue también destituido por la dirección ‘sanchista’ en verano. Desde entonces era Purificación Causapié la portavoz y se habría el debate de quien reemplazaría a Carmona, pero pocos se podían imaginar que su plan era ‘fichar’ a la competencia.
Seguramente en el PSOE sentará mal a muchos que se busque un candidato ‘de fuera’, pero en ‘Ahora Madrid’ deberían tomárselo con calma. ¿O no recuerdan a tantos dirigentes suyos haciéndose fotos cuando para mostrarse coleguillas? En lo referido a la situación con Cataluña? ¿No pasó Mauricio Valiente por las listas de IU antes de pasarse por las del PSOE? ¿No pasó Inés Sabanés por las mismas y también por las de Equo?
Celebres casos de ‘cambio’ de lista
Esto de que a un edil le ofrezcan cambiar de lista de unas elecciones a otras es original, aunque hay precedentes. Ramón Tamames era concejal de Izquierda Unida y le dio por pasarse al CDS de Suárez a mitad de legislatura para acabar votando con el PP la llegada al poder de Sahagún.
El en el parlamento europeo José María Mendiluce, siendo eurodiputado del PSOE aceptó ser candidato de Los Verdes a la alcaldía de Madrid. No consiguió ningún acta, pero si mosquear a muchos socialistas.
El alcalde de Vitoria, José Ángel Cuera, siendo del PNV se pasó a Eusko Alkartasuna en 1986 para, tres años después, volver al PNV, eso sí, sin dejar la alcaldía. Su colega de Bilbao, Jesús María Gorodo, dejó el PNV para fundar un partido local, Iniciativa Ciudadana Vasca, pero tras dejar el PNV.
Algo parecido hizo el alcalde de Jerez, Pedro Pacheco, primero alcalde del por el Partido Andalucista, luego por el Partido Andaluz para el Progreso y luego por el Partido Socialista Andaluz, y luego a la cárcel, aunque esa es otra historia.
Aunque de cambio de listas gana que fuera alcalde de Ciudad Real, Lorenzo Selas, primero por la UCD, luego por Alianza Popular, luego por una candidatura independiente localista, y luego por el PSOE, el abanico completo.
Sergio Marqués era presidente de Asturias por el PP, pero a mitad de legislatura se largó para fundar su partido propio, Unión Renovadora Asturiana, aunque aquello no duró.
Juan Cruz Allí era presidente de Navarra por UPN y a mitad de la legislatura lo dejó para fundar el suyo propio el Convergencia de Demócratas de Navarra, aunque tampoco tuvo un gran éxito.
Juan Hormaechea, presidente de Cantabria como independiente en el PP en 1990 rompió con el partido y fundó el suyo propio con el que recuperó el poder en 1991, volvió a integrarse en el PP ese año y volvió a romper con ellos en 1993, para acabar condenado a prisión, aunque indultado por el PP. Lo que tiene la política.
Algunas han sido más exitosas. Por ejemplo Manuel Hermoso siendo diputado de la Agrupación Independiente, logró a mitad de legislatura que su grupo, la federación canaria del CDS, la federación canaria de Izquierda Unida y grupos insulares se fusionaran todos para crear Coalición Canaria, que aún existe a día de hoy.
¿Se unirá Carmena a esta lista?