El periodista Hermann Tertsch ha criticado con dureza el episodio vivido este lunes en la Universidad Autónoma de Madrid, donde un empresario israelí fue agredido por varios jovenes.
Eytan Levy se disponía a participar en un encuentro hispano-israelí en el Parque Científico de Madrid pero, tal y como informó la Embajada de este país, el empresario resultó herido al ser agredido en un tumulto protagonizado por doscientas personas, a las que Tertsch ha calificado de «chusma proislamista radical» en su artículo de opinión publicado en ABC –«La Universidad tóxica«–.
El periodista ha arremetido contra el sistema universitario por actos tan desagradables como el vivido en la Autónoma:
«Pero vayamos ahora a las universidades, ese deleite de la tolerancia y del humanismo. Nuestras universidades, los focos de cultura en principio, la universalidad tolerante por definición, son -qué le vamos a hacer- una jaula de fieras sectarias. Llena de niñatos -perdón, también niñatas- que no saben nada y solo tienen convicciones.»
«La culpa de nuestra miseria educativa no la tiene sólo Zapatero. Pero es el que mejor la explota. Otro éxito del Gran Timonel. Lo que mejor trabaja es la basura intelectual. La recicla directamente. Como rojo se autocalificó en su día y es el único presidente del Gobierno que jamás se ha declarado comprometido con los intereses de todos los españoles. Hoy vemos que su siembra es una cosecha de facherío rojo que hace imposible una universidad razonable y provechosa.»
Para Tertsch estos hechos son la punta del iceberg del clima de crispación e intolerancia que vive el país:
«Les auguro con triste certeza mucho más. Según se vaya deteriorando nuestra situación general, estos personajes subirán el nivel de enfrentamiento. Y de momento sabiendo que sólo ellos actúan y no obtienen respuesta. Primero por supuesto la agresión a los judíos. Después a los más discrepantes. Después están los ricos y especuladores, como dice este Gobierno. Y después todo el que no obedezca.»
«La veda está abierta. La situación del País Vasco se extiende a toda España. Allí los nacionalistas han vivido los cuarenta años de ETA y su basura circundante con amabilidad y tranquilidad. Mientras los que no lo son han vivido aterrados por su propia vida y por sus familiares.»
«Aquí ninguno de los personajillos mediáticos de la izquierda sectaria necesita escolta porque saben que nadie de lo que califican ellos de la España fascista les va a tocar un pelo. La llamada España fascista son todos los españoles que no aplauden a Pepiño Blanco, que no sorben los vientos del pelo de Leire Pajín y no estudian con fruición los textos de Bibiana Aído. Es decir, nosotros los fachas.»
El columnista lamenta que estas agresiones son consecuencia de la campaña de ciertos medios en contra de Israel tras el ataque a la mal llamada «Flotilla de la libertad», rematando su escrito de manera muy contundente: «Sí la miseria educativa comienza mucho antes como los aparatos izquierdistas se han ocupado de controlar desde hace muchos años, en la universidad pública se refleja la cosecha de toda esa toxicidad totalitaria.»