El desquiciado vecino de Getafe de 46 años que mató este 20 de marzo de 2018 a sus dos hijos, de ocho y 13 años, los ahogó en la bañera antes de incendiar el piso.
Así lo han revelado las autopsias efectuadas este miércoles a ambos cuerpos en el Instituto Anatómico Forense de Madrid.
Fuentes policiales han informado que el autor del doble parricidio llevaba, cuando se suicidó tirándose a las vías del tren justo delante de la máquina, entre sus pertenencias una nota de despedida en la que explicaba que había hecho todo para que sus hijos no sufrieran.
La espantosa realidad esuqe se estaba separando de su mujer y todo indica que sólo pretendía hacerle daño.
El parricida habría matado primero a su hija y, después, a su hijo –con dificultades de movilidad, ya que sufría parálisis cerebral.
