"Si no la imputara sería un cierre en falso en descrédito de la máxima de que la Justicia es igual para todos"
El juez del Juzgado de Instrucción número 3 de Palma que instruye el Caso Nóos, José Castro, ha imputado a la infanta Cristina y la ha citado a declarar el próximo 27 de abril a las 10.00 horas, según han informado a Europa Press fuentes judiciales.
La imputación se produce una semana después de que Diego Torres, el ex-socio de Iñaki Urdangarin, marido de la Infanta, aportara nuevos correos para tratar de demostrar su implicación en la empresa.
Entre esa documentación había varios emails que el marido de la Infanta Cristian remitió a su mujer para consultarle diversas gestiones que tenía intención de realizar al frente del Instituto Nóos.
LOS MAILS
Más en concreto, en uno de ellos, fechado el 20 de febrero de 2003, Urdangarin remite a la hija del Rey Don Juan Carlos «una comunicación de Nóos que tengo pensado enviar». Y prosigue: «Hay dos versiones. Clientes, ‘colab’ y amigos y la otra para Octagon (no quiero sacar ampollas). Léelo y dime lo que piensas please… Ciao».
En el mismo correo, el Duque le comenta que «a veces por no saber lo que piensas voy más perdido, pero mi reacción no es la de dejarte así».
Mediante otro email, del 17 de junio del mismo año, Urdangarin le reenvía a su mujer un mensaje de Nissan sobre la resolución del concurso ‘Estudio de notoriedad World Series by Nissan’, en el que esta compañía indica que una vez recibidos y analizados los presupuestos solicitados, la mejor oferta es la presentada por Nóos.
En otro correo, fechado el 5 de abril de 2004, el Duque reenvía adjunto a la Infanta un artículo que «trabajamos el día pasado en el seminario y un resumen del mismo. Me parece interesante».
El 26 de febrero de ese año, el Duque envío otro correo al secretario personal de las Infantas, Carlos García Revenga, en el que le pedía que le diese «una copia a Cristina de mi parte».
SE DIERON POR VÁLIDOS
Precisamente, el juez Castro dictó este martes un auto judicial en el que deniega la petición formulada por Urdangarin, de nulidad y expulsión de la causa de los emails aportados por su exsocio en el Instituto Nóos, Diego Torres.
En este sentido, recordó que ni el Duque de Palma «ni una sola persona» ha alegado «en ningún momento» la falta de autenticidad de los emails aportados a la causa por Torres.
En el citado auto, el magistrado señala que durante su declaración, si bien Urdangarin hizo uso de su derecho a no contestar a las preguntas que así lo estimó oportuno, «en ningún momento alegó la falta de autenticidad de ningún concreto correo por el que se le preguntó, por lo que se está en el caso de desestimar que los correos aportados por copia impresa hayan sido objeto de alguna adulteración maliciosa que, además, de haberla sido, a buen seguro que habría tenido un contenido mucho más incriminatorio.
Asimismo, Castro emitió este martes otro auto en la que desestima los recursos planteados por Urdangarin y Torres contra la solicitud de la Agencia Tributaria para conocer si ambos se habían acogido a la regularización fiscal.
«NO SE ENTIENDE QUE EL REY NO LE COMENTARA NADA»
El titular del Juzgado de Instrucción número 3 de Palma, José Castro, asevera, en el auto que ha dictado para acordar la imputación de la Infanta Cristina en el marco del caso Nóos, «que no se acaba de entender que S.M. El Rey no comentara con su hija las críticas o recomendaciones que había hecho llegar o proyectaba hacer a su marido» para instarle a desvincularse del Instituto Nóos.
«E incluso que consensuara con ella su alcance y el compromiso, expreso o tácito, de que de alguna manera velara por su cumplimiento lo que le debería haber llevado a Doña Cristina a la conclusión de que las recomendaciones de su padre no se estaban siguiendo y cuestionar al respecto la actitud de su marido», expone el juez en la resolución judicial, en la que cita a declarar a la Infanta para el próximo 27 de abril.
Según abunda el magistrado en un auto de 18 páginas, «se hace alusión a S.M. El Rey pues mal puede en buena lógica admitirse que [el asesor jurídico de la Casa Real] Don José Manuel Romero actuara a sus espaldas cuando ordena, recomienda o aconseja a su yerno que se abstenga de determinados comportamientos», en relación a los negocios a los que se dedicaba el Duque de Palma, Iñaki Urdangarin, pese a ser miembro de la Familia Real.
No obstante, asevera que «por encima de tales razones hay una de superior peso y es la de por qué razón iba el señor Romero a asumir una carga y responsabilidad que no le correspondían respecto de personas tan estrechamente vinculadas a S.M. El Rey, como eran su hija y yerno, sin contar con su anuencia».
Sobre la base de lo anterior, afirma el instructor, existen versiones «matizadamente distintas» sobre cuál fue el contenido exacto de la recomendación que supuestamente transmitió el monarca a Urdangarin a través de Romero, pero «sea cual fuere, es lo cierto que todas tienen en común un reproche hacia las actividades de aquél» en relación con Nóos y una «insinuación» de apartamiento de los órganos de gobierno de la misma o de cualquier otra entidad.
Así pues, el magistrado apunta que tampoco «es fácil asimilar» que el secretario personal de las Infantas, Carlos García Revenga, también imputado en esta causa, «afirmara desconocer el mensaje» que presuntamente transmitió el Rey ya que «tal desconocimiento sólo podría encontrar sustento en una absoluta falta de comunicación», estructurada sobre «una incomprensible falta de curiosidad en conocer por qué en un momento determinado se le pide su dimisión y la de la Infanta, a la que asesora»
«Sobre esta argumentación y acorde con su función de secretario de S.A.R. La Infanta», en referencia a García Revenga, «obligado estaba a comentar con ésta las razones más plausibles de la decisión real y su alcance de presente y de cara al futuro», señala.
«SI NO LA IMPUTARA SERÍA UN DESCRÉDITO DE QUE LA JUSTICIA ES IGUAL PARA TODOS»
El juez asegura además en el auto que ha decidido imputar a la Infanta Cristina antes de finalizar la instrucción de esta pieza, dado que, en caso contrario, se hubiese dejado que «se perpetúe la incógnita» de su supuesta implicación en esta causa, lo que, en su opinión, sería un «cierre en falso en descrédito de la máxima de que la Justicia es igual para todos y una clara contradicción a la práctica cotidiana de los juzgados y tribunales que en casos similares es muy escasamente probable que prescindieran del trámite».
En el mismo Castro afirma que a partir de la declaración de Diego Torres, exsocio del Duque de Palma, Iñaki Urdangarin, en el Instituto Nóos, y de los numerosos correos electrónicos que aportó en su curso, así como después de escuchar la versión dada por el secretario de la Infantas, Carlos García Revenga, «surgen una serie de indicios que hacen dudar» que la Infanta Cristina «desconociera la aplicación que su esposo diera a su mención como vocal de la Junta Directiva de la Asociación Instituto Nóos y en la mercantil Aizoon S.L.».
Por ello, ante los «indicios» existentes, el juez considera «inevitable» que la hija del Rey preste declaración, al objeto de despejar «cualquier duda», dado que «hallándonos en la recta final de la instrucción, no parece procedente que ésta se ultime gravitando la más mínima sombra de sospecha sobre la intervención que haya podido tener y si fuere otra la valoración que su versión arrojara, se depuren las responsabilidades que procedan».
No obstante, Castro aclara que «quede bien claro» que su imputación «no prejuzga en absoluto actuaciones procesales ulteriores», de tal manera que señala que queda «absolutamente incólume todo el abanico de opciones procesales legalmente previsto, desde la de su anticipado sobreseimiento, hasta la de abrir el cauce para posibilitar al Ministerio Fiscal, acusación particular y popular que formulen sus reproches penales y a los actores civiles sus pretensiones civiles».
«Si los aludidos indicios abocaran a uno u otro resultado es algo que no cabe aventurar en este momento, pero sí que tienen virtualidad suficiente para que, al igual que se ha hecho con los restantes componentes de la Junta Directiva del Instituto Nóos sea convocada Doña Cristina Federica de Borbón y Grecia, al objeto de hacer posible que, en calidad de imputada, precisamente en garantía de sus derechos, facilite las explicaciones que tenga por conveniente», recalca.
Así, Castro anuncia que la declaración de la Infanta versará sobre su intervención en el Instituto Nóos y en la entidad mercantil Aizoon S.L., así como el «manejo y destino de los fondos derivados de las mismas y las cuestiones que razonablemente se desprendan».