La niña nació con 8 meses en el antiguo hospital de Son Dureta, y fue llevada a una incubadora
Cristina Amunategui sospecha que en agosto de 1970 alguien le robó a la pequeña que dio a luz, con ocho meses, en el antiguo hospital palmesano de Son Dureta.
Por eso, este jueves 8 de mayo de 2014, una comisión judicial formada por miembros de la Policía Científica, funcionarios del juzgado y representantes del Grupo de Homicidios, ha procedido a la exhumación de los supuestos restos en la tumba familiar de su exmarido -donde hay enterradas seis personas- y en donde según figura en los registros del lugar fue sepultada antaño la niña. Pero ella no se fía.
EXTRAÑOS REGISTROS
Y es que, entre otras cosas, esta mujer vecina de Sant Agustí, que denunció el caso en 2013, -tras hacerse públicos a través de los medios de comunicación varios casos de niños robados-, ha averiguado que
«solo hay anotaciones de su muerte en el Registro Civil, que están firmadas por un doctor cuyo apellido no cuadra con los ginecólogos que entonces había en Son Dureta».
El parto se le adelantó cuatro semanas, por lo que la niña fue ingresada en la incubadora. La madre fue dada de alta a los cuatro días del parto, mientras el bebé permaneció hospitalizado.
«Lo único que me dijo por entonces mi marido es que había que llevar un vestidito blanco y una cajita. Nunca me atreví a ver el cadáver, porque estaba en estado de shock».