El Gobierno británico y la patronal de agencias británicas y touroperadores ABTA, no se andan con tantos miramientos como en Baleares, o en el propio Madrid, donde todo el desmadre de Magaluf lo achacan a una mera cuestión de educación, quizás con miras a ‘salvar los papeles’ de ciertos empresarios sin escrúpulos.
Así, según da cuenta este miércoles 9 de julio de 2014 el diario ‘Ultima Hora’ bajo la rúbrica del periodista Ruiz Collado, exigen tanto al Gobierno español como al Govern
«que adopten medidas concretas en Magaluf y Punta Ballena, al margen de los mensajes institucionales que se llevan cabo en el Reino Unido, entre ellas el cierre de locales y sanciones a los bares que propicien el turismo de alcohol o las felaciones a cambio de copas en los bares y pubs».
La decisión se ha dado a conocer tras la reunión entre el Ministerio de Industria, Energía y Turismo el embajador del Reino Unido, Simon Manley, junto con el cónsul general británico en Cataluña y Baleares, Andrew Gwatkin, así como la secretaria de Estado de Turismo, Isabel Borrego, y el conseller de Turisme, Jaime Martínez.
Simon Manley fue conciso:
«Queremos que todos los turistas británicos puedan pasar las vacaciones con seguridad, de ahí que hemos acordado colaborar y trabajar de forma conjunta con las autoridades españolas».
ABTA no se queda corta, y apunta que
«hay una cierta legitimización para erradicar el turismo de alcohol en Punta Ballena y poder dar carpetazo a una situación que dura años y que nadie ha querido poner remedio. Ahora, sí que se podría hacer».