El Govern ha hecho también una declaración contraria a la Ley Orgánica de Mejora de la Calidad de la Enseñanza (LOMCE)
El nuevo ejecutivo balear de izquierdas ha aprobado en su primer Consell de Govern una propuesta de derogación de la Ley de Símbolos y ha desistido de los recursos que el gabinete del PP había planteado ante el Tribunal Supremo en defensa de Tratamiento Integrado de Lenguas (TIL).
La presidenta del Govern, Francina Armengol, ha comparecido ante los medios para explicar que sus dos primeras medidas responden al «deseo de los ciudadanos» y suponen
«derribar dos símbolos de una época que ha acabado».
Para Armengol, la prohibición de exhibir símbolos no oficiales en edificios públicos «se hizo para perseguir a quien pensaba diferente», por lo que será eliminada mediante un decreto que tramitará el Parlament como proyecto ley y que incluirá la amnistía para quienes pudieran haber sido expedientados durante la vigencia de la norma.
EL TIL
En cuanto al TIL, el Consell de Govern ha ordenado el desestimiento de los tres recursos que el ejecutivo de José Ramón Bauzá planteó ante el Supremo contra la sentencia del Tribunal Superior de Justicia que anulaba el decreto de trilingüismo, lo que que según el portavoz del gabinete, Marc Pons, «entierra» el TIL.
La presidenta las ha definido como «dos medidas importantes para la sociedad», necesarias para «cambiar el rumbo» de la política de «imposición» que ha imperado con el Govern del PP.
Aunque la anulación de los recursos en favor del TIL deja sin efecto el decreto inicial que establecía el reparto igualitario de las horas lectivas en catalán, castellano e inglés, Armengol ha anunciado que impulsará «una propuesta específica de derogación» a instancias de MÉS, además de abrir de inmediato el diálogo con la comunidad educativa.
LOMCE
Por otro lado, el Govern ha hecho una declaración contraria a la Ley Orgánica de Mejora de la Calidad de la Enseñanza (LOMCE) y ha pedido una reunión urgente de la Conferencia Sectorial de Educación para debatir sobre la aplicación de esa norma.
«Queremos cambiar el calendario de aplicación (de la LOMCE) porque si en las generales no gana el partido que gobierna ahora» se derogará la ley, lo que es contrario a la «estabilidad» que requiere una mejora real de la calidad en la educación.
«Las competencias que tenemos son las que son, los currículum autonómicos, y lo que estamos haciendo es ronda de encuentros con la comunidad educativa para frenar al máximo la aplicación de esta ley»
sin vulnerarla, ha incidido la jefa del ejecutivo.
En esta línea, el Govern de coalición entre PSIB y MÉS ha aprobado una declaración institucional en la que se compromete a promover la derogación de la LOMCE, «elaborada sin el necesario consenso de las fuerzas políticas y sociales, y sin escucharla voz de la comunidad educativa».
anuncia el ejecutivo balear.
Para ello ha aprobado un acuerdo por el que encarga al recién nombrado conseller de Educación, Martí March, que se dirija al nuevo ministro, Íñigo Méndez de Vigo, para que convoque de forma urgente una sesión extraordinaria de la Conferencia Sectorial de Educación para revisar ese calendario.
«El Govern se propone colaborar con otras comunidades autónomas para obtener de las autoridades estatales una respuesta urgente y adecuada a las necesidades actuales del sistema educativo, que sin duda debe incluir la modificación inmediata del calendario de implantación de la LOMCE».
