En su mensaje, Versaldi destacó el clima de paz en el que se desarrollaron las negociaciones entre representantes de la PUCP y de la Santa Sede
La Asamblea Universitaria de la Pontificia Universidad Católica de Perú celebró ayer una sesión extraordinaria. En ella, Su Eminencia Cardenal Giuseppe Versaldi, Prefecto de la Congregación para la Educación Católica, dio un mensaje de la Santa Sede a propósito de la propuesta de reforma del Estatuto de la Universidad.
En su mensaje, Versaldi destacó el clima de paz en el que se desarrollaron las negociaciones entre representantes de la PUCP y de la Santa Sede. Precisó que la comisión en la que se desarrolló esta negociación, en todo momento, buscó la verdad y el bien común, indicando que la Santa Sede valoraba y reconocía el servicio que la PUCP da a la sociedad civil peruana.
Explicó algunas de las características centrales de las universidades católicas en el mundo, resaltando la misión evangelizadora de la Iglesia y que ella propiciaba un diálogo entre la fe y la razón. En ese sentido, destacó que la Iglesia reconoce la libertad académica de cada estudioso en la disciplina de su competencia, dentro de las exigencias del bien común, pues las universidades católicas se caracterizan por buscar la verdad integral en relación con el bien integral.
Señaló que la Iglesia no busca un control o dominio de nuestra institución, sino un acompañamiento sincero en el marco del respeto a nuestra autonomía. Enfatizó que se respetarán los derechos de todas y todos quienes integran la comunidad de la PUCP, en un marco de tolerancia en el que la libertad de la investigación académica está garantizada.
En cuanto a los juicios pendientes con la archidiócesis de Lima, indicó que una vez que la Asamblea Universitaria aprobara las modificaciones al Estatuto de la PUCP, si es que tiene a bien hacerlo, se nombraría una comisión mixta que estaría integrada por representantes de la Santa Sede, representantes de la PUCP y representantes de la Iglesia local, a fin de llegar a un acuerdo extrajudicial que solucione este tema.
No obstante lo anterior, dejó en claro que la Santa Sede no quiere apropiarse de los bienes de la PUCP, pues reconoce la propiedad de la Universidad sobre ellos.
Finalmente, invitó a la comunidad universitaria a crear un nuevo clima en su relación con la Iglesia, que sane heridas, olvidando el pasado y mirando hacia el futuro; escuchando al otro, proponiendo y no imponiendo.
La próxima sesión de la Asamblea Universitaria, que tendrá lugar el 14 de octubre, será la encargada de decidir sobre el acuerdo que se tome en cuanto a la modificación de los Estatutos de la PUCP.