No podemos aceptar que nos impongan, ni nosotros imponer, pero busquemos un diálogo donde de verdad podamos trabajar Iglesia-Estado
El recientemente nombrado cardenal boliviano por el papa Francisco, Toribio Ticona, propuso este lunes un «acercamiento y un diálogo sincero» con el Gobierno del presidente Evo Morales, al que consideró «un amigo», y dejar de lado el distanciamiento entre Iglesia y Estado de los últimos años.
«De verdad quisiéramos un acercamiento, un diálogo sincero, porque vivir así enojados, separados y atacándonos unos a otros, no es el camino», señaló Ticona en rueda de prensa.
El cardenal boliviano admitió que Morales como presidente «ha hecho muchas cosas», pero sin embargo insistió que «eso no quita que tenemos que respetarnos mutuamente«, por lo que en el marco del trabajo de Conferencia Episcopal Boliviana «se pueden dar caminos de un entendimiento y de un acercamiento».
«No podemos aceptar que nos impongan, ni nosotros imponer, pero busquemos un diálogo donde de verdad podamos trabajar Iglesia-Estado», recalcó el prelado católico.
El cardenal se refirió a Morales como «un amigo» al que ha colaborado en sus marchas cuando éste fue dirigente cocalero, con el que consideró que en lo personal hay un una estima mutua y se dará una relación más amigable.
La relación entre la Iglesia católica y el Gobierno boliviano ha sufrido en el último tiempo episodios de críticas que algunos obispos han lanzado a la Administración de Morales en temas como la democracia, la administración de justicia y el narcotráfico, entre otros.
Una de las épocas más complejas en esa relación se vivió durante el cardenalato de Julio Terrazas, fallecido en 2015, en el que se desarrollaron varias controversias sobre reformas emprendidas por el Gobierno.
La respuesta de Morales y algunos de sus subalternos fue en muchas ocasiones dura con los mandos eclesiales, a los que se acusó de no seguir la mística del papa Francisco, con el que el presidente boliviano mantiene una relación estrecha.
Durante 1982 al 2015, Ticona fue obispo de una jurisdicción eclesial del altiplano en el departamento de La Paz, una región por la que pasaron muchas manifestaciones contra gobiernos bolivianos, escenario en el que llegó a conocer al actual presidente del país.
Ticona, de 81 años y origen quechua, fue limpiabotas, vendedor de periódicos, ayudante de minería y obrero en una fábrica de cerveza, hasta que a los 30 años fue ordenado sacerdote.
(RD/Efe)
