Desde Unamuno hasta el presente

800 años de la Universidad de Salamanca (y II)

"El talento cultivado a lo largo de ocho siglos hace de ella una institución protagonista del mundo"

800 años de la Universidad de Salamanca (y II)
Patio de la UPSA

Nosotros no podemos renunciar a uno de nuestros objetivos: influir en la sociedad para ayudar a la sociedad. Para ello ponemos nuestras capacidades humanistas al servicio de las fuerzas sociales, políticas y empresariales

(Saturnino Rodríguez).- El 25 de septiembre de 1940 el papa Pío XII produce la restauración y establecimiento de la nueva Universidad de Salamanca confiriéndola la categoría de Universidad Pontificia, recuperando las desaparecidas Facultades eclesiásticas de Teología y Derecho Canónico.

En 1963 sus grados eran reconocidos oficialmente por el Estado, siendo así la primera universidad privada en el ámbito autonómico de Castilla y León.

Con ello la actual Universidad Pontificia de Salamanca digamos «renacida» hace 75 años pretendía ser la continuación de las antiguas facultades eclesiásticas de la Universidad de Salamanca cuando la bula del Papa Alejandro IV de abril de 1255 confirmaba el Estudio General de Salamanca creado por Alfonso IX de León en 1218.

En los años 40 del siglo XX hubo varios intentos para unificar las dos Universidades salmantinas. Intentos y proyectos repetidos en los años 60, pero sin éxito. Por ello, poco a poco se fueron añadiendo nuevas carreras y títulos que llenarían el antiguo edificio de La Clerecía. A los cinco años se instauró la Facultad de Filosofía. En 1949 los estudios de Filología Bíblica Trilingüe y en 1958 los de Ciencias de la Educación. Le siguieron, ya en 1971, los estudios de Psicología y Ciencias Políticas y Sociología, Enfermería en 1980, Fisioterapia en 1986, Ciencias de la Información en 1988, Informática en 1990, y la Facultad de Ciencias del Seguro, Jurídicas y de la Empresa en 1992.

El Instituto Superior de Pastoral (ISP) fue erigido por la Comisión Episcopal de la Universidad Pontificia de Salamanca (UPSA) el 5 de octubre de 1955, y trasladado a Madrid en 1964.

La Sagrada Congregación de Seminarios y Universidades (Vaticano) reconoció y aprobó sus primeros estatutos (22 marzo 1956) y en 1967, (31 de mayo) la Sagrada Congregación para la Enseñanza Católica (Vaticano) lo vinculó a la Facultad de Teología de la Universidad salmantina.

La organización y estructura actuales de la Universidad Pontificia de Salamanca se definen en los años 70, convirtiéndose en Universidad de la Conferencia Episcopal Española (CEE), aceptando en su totalidad el espíritu del Concilio Vaticano II y encuadrándose en la nueva situación española con una destacada intención de participación​ en la nueva situación española.

La vida de la Iglesia Católica, la cultura y sociedad española, su proyección integración en Europa e Hispanoamérica y la misma historia salmantina son los marcos y matrices que orientan y sostienen su quehacer. En 1971 la Comisión Episcopal de Seminarios y Universidades reconoció su Bienio universitario de estudios como Sección de Teología Pastoral de la Facultad de Teología de la Universidad Pontificia de Salamanca, con la capacidad de conferir los grados de Licenciatura y Doctorado.

En este mismo espíritu y nuevo talante de renovación en estilo y fondo del Concilio Vaticano II hay que entender la creación del Instituto Superior de Pastoral (dependiente de la Universidad Pontificia de Salamanca,por parte de la Conferencia episcopal Española (CEE) cuyo presidente sería el canciller de la Universidad Pontificia en el nuevo Campus de Madrid ocupando los edificios de la Fundación Pablo VI (Facultades y dos Colegios Mayores residencias para postgraduados. Instituto por el que han ido desfilando destacadas figuras -clérigos y laicos – de la vida española e iberoamericana y acompañando la reflexión y «cambio-renovación conciliar» de la vida social.

Vale la pena recordar aquel grupo excelente de la Universidad Pontificia de Salamanca (Sánchez Aliseda, Lamberto de Echevarría, Casiano Floristán, Luis Maldonado, los obispos Estepa y Mauro Rubio…) que crearon el Instituto Superior de Pastoral en 1955. Durante los últimos cursos, más de cincuenta congregaciones e institutos religiosos, numerosos clérigos diocesanos de España, de América Latina, África y Asia, han confiado en este centro su formación teológico-pastoral.

Entre los antiguos profesores y exalumnos del Instituto, en sus 62 años de existencia (53 de ellos en Madrid), se cuentan laicos y misioneros de toda condición, superiores provinciales de religiosas y religiosos, varios obispos, arzobispos y cardenales.

En la inauguración oficial del curso académico 2014-15 el entonces Rector de la Universidad Pontificia (UPSA) Ángel Galindo anunciaba la celebración del 75º aniversario recordando las bien conocidas razones que movieron al ministro de Fomento para suprimir las facultades eclesiásticas en el siglo XIX diciendo que … «nosotros no podemos renunciar a uno de nuestros objetivos: influir en la sociedad para ayudar a la sociedad. Para ello ponemos nuestras capacidades humanistas al servicio de las fuerzas sociales, políticas y empresariales».

En ese discurso (inauguración del curso académico 2014-15, 75º aniversario de la Restauración) el Rector en su «discurso de declaración de identidad» Señalaba cómo en 1940, bajo los auspicios del Papa Pío XI, los obispos españoles quisieron recoger oficialmente este espíritu universitario para impulsar la ciencia y los saberes. «Se trata de recordar el periodo de Restauración de las facultades eclesiásticas prohibidas por los sistemas liberales en el entrno de 1852».

«No pretendemos-decía el rector- celebrar nuestros orígenes, efemérides que conmemoraremos Dios mediante junto a nuestra universidad hermana la USAL en 2018. Queremos subrayar la importancia de las materias impartidas por aquellas Facultades que estuvieron en el origen de la universidad española y europea en el siglo XIII, así como el espíritu humanista que las sustenta, de manera que sirvan de consolidación para otras facultades y titulaciones que posteriormente se han ido creando».

Meses después en el mismo contexto de celebración del 75º aniversario visitaba en la festividad de Sto. Tomás de Aquino (marzo 2015) la Universidad Pontificia de Salamanca (UPSA) el Prefecto de la Congregación para la Educación Católica, el cardenal Zenon Grocholweski, recordando con otras palabras la misma «declaración de identidad» de los obispos españoles en el mismo sentido que lo hiciera el Rector: «La Universidad Pontificia de Salamanca, inserta en la gran tradición universitaria de Europa, hunde sus raíces en el siglo XIII, cuando de la colaboración entre el Papa y el Rey surgió una institución capaz de aunar los saberes sobre el hombre, la sociedad, la naturaleza, la historia y Dios«.

Una Universidad al compás de los tiempos

La Universidad Pontificia de Salamanca (UPSAL) retomando las desaparecidas titulaciones iniciales va desarrollando su tarea de investigación, humanismo y servicio a la sociedad con fuerte atractivo también en el exterior. En septiembre del año 2015 era elegida como Rectora la catedrática en Derecho Eclesiástico del Estado, Myriam Cortés Diéguez, sustituyendo al anterior rector Ángel Galindo, siendo así la primera mujer casada y madre de cuatro hijos en asumir el mando de una alta institución elesiástica.

La UPSA cuya sede central está en Salamanca también tiene Campus en Madrid y cuenta además con centros y titulaciones en Santiago de Compostela y Oviedo, y numerosos Institutos teológicos afiliados o patrocinados en varias provincias españolas. De la Universidad Pontificia también depende el Instituto Español Bíblico Arqueológico (IEBA) Casa de Santiago en Jerusalén, que ofrece residencia a sacerdotes, profesores y alumnos de la Facultad de Teología que deseen investigar en Jerusalén.

La Universidad de Salamanca a sus 800 años

Retomando la historia de la Universidad de Salamanca – hoy son dos – volvemos a la Universidad de Salamanca (USAL) Universidad de Salamanca que sigue manteniendo su gran capacidad de atracción con un alumnado estable en torno a los 30.000 estudiantes. Cuenta para atenderles con nueve campus distribuidos entre Salamanca, Ávila, Zamora, Béjar y Villamayor entre los que se reparten las 26 facultades y escuelas superiores y los 12 centros de investigación que abarcan aspectos tan variados como las biociencias o el láser, pasando por desarrollos agroalimentarios, las neurociencias, los estudios de historia o la investigación básica, entre otros.

La Universidad de Salamanca es la más antigua de España y del «mundo hispánico» y una de las más antiguas de Europa junto con las de Bolonia en Italia , la Sorbona de Paris y Montpellier, en Francia, Salerno en Italia, Oxford, y Cambridge en Reino Unido. Nació como una universidad eminentemente jurídica, en consonancia con la Universidad de Bolonia y en contraste con las universidades de Oxford y París, más centradas en la Teología y las Artes.​

La ciencia y la tecnología desarrolladas en la Universidad de Salamanca han protagonizado algunos de los avances más importantes de los últimos siglos. Del Estudio salmantino surgieron personalidades como Torres Villarroel o Abraham Zacut quién desarrolló el Almanach Perpetuum, un tratado de astronomía imprescindible para la navegación que hizo posible unir continentes. El pensamiento avanzado de Francisco de Vitoria ha hecho que se considere a Salamanca cuna del Derecho Internacional, pero por sus aulas han pasado otros personajes ilustres como Fray Luis de León o Francisco de Salinas o Antonio de Nebrija, creador de la primera gramática del español. Domingo de Soto, Diego de Covarrubias, Domingo de Báñez, Luis de Molina y Juan Antonio Meléndez Valdés.

Desde los Cursos Internacionales se elaboran desde hace años los Diplomas de Español como Lengua Extranjera (DELE) y, recientemente, un acuerdo firmado con el Instituto Cervantes, la Universidad Nacional Autónoma de México y la Universidad de Buenos Aires, ha hecho que la Universidad de Salamanca lidere, junto a ellas, el desarrollo del primer certificado digital del español (SIELE) que podrá realizarse desde cualquier parte del mundo y que llevará la certificación del estudio salmantino como aval a su validez.

A ellos se unen los centros dedicados a estrechar vínculos académicos y culturales con otros países y culturas como el Centro Cultural Hispano Japonés, el Centro de Estudios Brasileños o el Instituto de Estudios de Iberoamérica. Otro de los rasgos distintivos de la Universidad es la enseñanza del Español que atrae a miles de estudiantes extranjeros en los distintos programas educativos desarrollados en uno de los mayores centros de formación para extranjeros de prestigio mundial, la entidad Cursos Internacionales de la Universidad de Salamanca.

En el Claustro de Doctores figuran jefes de estado de varios países iberoamericanos como Fernando E. Cardoso, Oscar Arias, Ricardo Lagos, Luiz I. Lula da Silva o Tavaré Vázquez Rosas; premios nobeles como Mario Vargas Llosa, José Saramago, Paul Nurse o Severo Ochoa; pensadores e investigadores que han marcado el curso de sus disciplinas impulsando el progreso del conocimiento. El humanismo, la inteligencia y el talento cultivado a lo largo de ocho siglos hace de la Universidad de Salamanca una institución protagonista del mundo.

En épocas más recientes, la Universidad ha acogido a grandes pensadores y estadistas como Miguel de Unamuno, Enrique Iglesias, Jacques Delors o Adolfo Suárez que han contribuido a la construcción del orden internacional.

Acabamos con 4 curiosidades «populares» de la Universidad

Llegados a este punto no está de más referirnos a cuatro curiosidades que han inducido a posteriormente a equívocos populares. En esa fachada de entrada a las Escuelas Mayores destaca un medallón con los Reyes Católicos orlado con un texto griego que dice: «Los Reyes a la Universidad y la Universidad a los Reyes». Sobre sus cabezas, aparecen el «yugo y las flechas» que los Reyes Católicos – mantenían como símbolo de la unidad de los reinos coincidentes con las iniciales de sus nombre Y y F, completamente ajenos al carácter «franquista» que han querido ver en el escudo de España de los años del dictador.

El Vitor o Victor derivado del crismón del Bajo Imperio romano, fue adoptado por algunas universidades españolas desde el siglo XIV, especialmente la de Salamanca,​ la de Alcalá de Henares, la de Sevilla​ y las de Indias,​ como emblema conmemorativo de quienes obtenían el título de doctor, en inscripciones murales con pintura roja o negra que se conservan hoy en día. Tras la Guerra Civil Española el dictador Franco lo eligió para ser utilizado en el Desfile de la Victoria (19 de mayo de 1939) y a partir de entonces, durante toda la dictadura franquista, como un emblema propio de Franco que nada tiene que ver con él.

La tercera curiosidad – casi un icono de la ciudad -se encuentra en la decoración de la portada de la Universidad de Salamanca que se acabó de tallar en el año 1553, en donde encima de un cráneo se encuentra la escultura de un sapo (que equivocadamente han atribuído a una rana). Este símbolo servía como un aviso a los estudiantes que se utilizaba como representación del pecado de lujuria, asociado a la muerte al encontrarse encima de un cráneo. Según la tradición, se dice que lograr encontrarlo en la fachada auguraba éxito en los estudios. El mismo sentido parece tener su representación en la Catedral de Estrasburgo como en otras catedrales góticas y en los cuadros del Bosco.

Y una última e incomprensible curiosidad es la presencia de un astronauta entre los relieves de la fachada de la Catedral Nueva De Salamanca comenzada en 1513. La explicación es tan sencilla como ésta: Al acoger Salamanca la exposición artísticas de «Las Edades del Hombre» en el año 1993, se decidió restaurar la Puerta de Ramos, muy deteriorada por el paso del tiempo. En la restauración el astronauta fue labrado en piedra en 1992 por el cantero Miguel Romero, siguiendo la tradición de incorporar un elemento contemporáneo en cada restauración.

CONTRIBUYE CON PERIODISTA DIGITAL

QUEREMOS SEGUIR SIENDO UN MEDIO DE COMUNICACIÓN LIBRE

Buscamos personas comprometidas que nos apoyen

COLABORA
Autor

José Manuel Vidal

Periodista y teólogo, es conocido por su labor de información sobre la Iglesia Católica. Dirige Religión Digital.

Lo más leído