El Comité de Empresa del 112 (UGT, CCOO, CSIT y CSI-F) ha pedido a la consejera de Presidencia y Justicia de la Comunidad de Madrid, Regina Plañiol, y al gerente del servicio de emergencias que «de una vez por todas» resuelvan la falta de personal y las largas colas de llamadas en espera que sufren los madrileños.
En un comunicado, el Comité de Empresa señala que después de cuatro años de peleas con la Gerencia de Madrid 112 y con la consejería, los trabajadores de este organismo «recibimos gratamente la noticia del cambio de sus titulares, tras las últimas elecciones autonómicas», pero que esta alegría les ha durado poco.
Según los sindicatos, a los anteriores responsables del 112, «las largas e interminables colas de llamadas en espera que vienen sufriendo los ciudadanos de Madrid para que sean atendidas sus llamadas de emergencia nunca les pareció motivo suficiente para cubrir las más de 30 vacantes de operadores de Emergencias presupuestadas»; y los acuerdos con el Comité de Empresa sólo tenían el fin de «callar a los trabajadores».
La llegada de una nueva consejera y un nuevo gerente trajeron de nuevo esperanza a los profesionales del 112, según los sindicatos, pero ha durado poco, señalan. Además, denuncian que, con motivo de las Jornadas Mundiales de la Juventud (JMJ), «llevamos varios días asistiendo perplejos a la lluvia de declaraciones en los medios de comunicación que pretenden una vez más vender humo a los ciudadanos», manifestando refuerzos del 10% de la plantilla.
«Lo que no consiguieron las tormentas torrenciales, los incendios forestales, las nevadas que mantienen atrapados en las autopistas durante horas a cientos de ciudadanos, por fin parece que lo conseguía la presencia de Su Santidad en la Comunidad», indican, añadiendo que «poco nos ha durado la alegría. Las jornadas papales ya han comenzado, y la sala del 112 sigue bajo mínimos».
Según el Comité de Empresa, no hay aumento de plantilla y como cada verano, hay numerosos momentos en los que sólo se dispone de 6 ó 7 operadores para atender las llamadas de los 6 millones de habitantes de la comunidad, más los visitantes.
Denuncian que la media es de más de un millón de personas por operador de Emergencias, y que sigue sin ponerse en marcha la contratación de nuevos profesionales y sin cubrirse las bajas, excedencias, fallecimientos y vacaciones. «Es en este momento cuando los ciudadanos tendrían que pedir con fe inconmensurable a las alturas que no les pase nada grave: la espera ante un paro cardiaco de un familiar, por ejemplo, puede ser mortal», advierten.
«Este Comité de Empresa del 112, más en lo terrenal, pide directamente a la consejera y el gerente, que de una vez por todas resuelvan la precariedad del servicio, y abandonen el camino de sus predecesores de utilizar este centro únicamente como el escaparate de la buena gestión de la Comunidad de Madrid, pues si, hasta el momento, a alguien tienen que agradecerles los ciudadanos de Madrid la buena atención de las emergencias es a los profesionales que siguen, en condiciones adversas, demostrando su gran profesionalidad», concluye.
