El mensaje de Francisco con la doble canonización es que en la Iglesia siempre vamos unos en los hombros de los otros
(José M. Vidal, Roma).- Como otros muchos obispos españoles, Braulo Rodríguez, arzobispo de Toledo y Primado de España, está estos días en Roma, donde ha asistido a la ya conocida como «jornada histórica de los cuatro Papas». Con los recuerdos todavía frescos, asegura que fue una demostración de que «en la Iglesia vamos unos sobre los hombros de los demás». También dice que San Juan Pablo II era «conservador, pero no integrista» y espera que la Reina le insista al Papa, para que venga a España en 2015.
¿Qué le pareció la jornada de ayer?
Se dio una circunstancias muy especial, porque, como dice la gente, fue la fiesta de los cuatro Papas: los dos que estaban siendo canonizados, el Papa Francisco y el Papa emérito. Yo nunca había asistido a una canonización y, además, los dos canonizados han sido contemporáneos míos. Con Juan Pablo II fue con el que viví algunos años de presbítero y todos los de obispo, mientras él vivió. Él fue el que me nombró. Así que me sentí un poco sorprendido, al ver a gente que fue contemporánea mía y que supo seguir al Señor y ser valiente.
¿Cuando los santos son cercanos y conocidos, llegan más al corazón?
Sí, aunque también hay santos a los que sientes muy cercanos por muchas cosas. Pero es distinto haberles conocido, acordarte de ellos. Porque te das cuenta de que han vivido las mismas peripecias que tú, las mismas circunstancias históricas, las mismas características eclesiales, las mismas connotaciones sociales…Yo miraba de vez en cuando sus dos tapices en la fachada de la Basílica, que además son muy características de ellos, y sabía que no iba a llover. Y eso que estaba anunciada lluvia…
¿Cuál fue para usted el momento más emocionante?
El momento en que el Papa dijo «hemos discernido que estos dos discípulos y apóstoles del Señor son también por Jesucristo modelos para otros cristianos». Eso se dice también en las beatificaciones, pero en las canonizaciones es mucho más fuerte.
¿Cree que la Iglesia gana en imagen, en visibilidad y en influencia con actos como éste?
Nuestra sociedad devora muchas cosas y muchas imágenes, pero creo que hay una parte de ella a la que sí le llega. Sobre todo cuando son actos muy grandes pero en realidad muy sencillos. La liturgia romana es así de parca, y canonizaciones no hay tantas. Entonces, creo que una celebración así es una imagen de que Jesucristo puede triunfar. Y que nosotros podemos triunfar gracias a su persona.
¿Qué nos ha querido decir el Papa Francisco con la canonización de estos dos papas, parecidos pero distintos?
Mi interpretación es que nos ha querido decir que en la Iglesia siempre vamos unos en los hombros de los otros. Que las personas somos distintas, gracias a Dios, pero no absolutamente contrapuestas. Ése es el sentido profundo de la humanidad: ser uno. Aunque muchas veces fracasemos.
¿El hilo conductor de los dos papas canonizados es el Concilio?
Yo creo que sí, aunque de distinta manera. Juan XXIII venía de una región muy católica de Italia, de una familia muy clásica, cristiana, que rezaba, etc. Él dijo que quería ser sacerdote en la adolescencia. Su fe abarcaba toda su persona. Y en el caso de Juan Pablo II también, aunque su historia es muy distinta. Él no tuvo esa ruptura que a veces sufren los occidentales por la separación de la Iglesia y la «vida». Eso es lo que llamó más la atención de Juan Pablo II a algunas personas y grupos de nuestra cultura occidental. Por eso algunos le dijeron que era conservador. Y es posible que fuera conservador, pero no era para nada una persona integrista. Me parece que es absurdo. Pensar que era integrista es no entender lo que era Juan Pablo II.
El Papa Francisco insistió de nuevo en la misericordia. ¿Cree que es la seña de identidad de su pontificado?
Es lo primero de lo que habla siempre. Juan Pablo II también dijo, en un domingo de Pascua de hace años, que la misericordia es lo que puede acercar a la gente a Jesucristo y dar una palabra de aliento para la vida. El misterio pascual se entiende mejor dentro de la misericordia. Es lo que explica por qué Jesús murió y por qué vivió la vida que vivió y se entregó.
¿Vamos a tener al Papa en España en el 2015?
Bueno, yo le dije a su Majestad la Reina que le insista en su encuentro. Y me dijo que sí, que lo haría.