Es una delicia contar con un cardenal que se acuerda de los desprotegidos y nos recuerda a los demás que todos merecemos morir con dignidad
(Mensajeros de la Paz).- Mañana miércoles 2 de noviembre, conmemoración de Todos los Difuntos, el arzobispo de Madrid, monseñor Osoro, celebrará una misa en la iglesia de San Antón (Calle Hortaleza, núm. 63) en honor a las personas que mueren solas y en la calle. El acto será a las 20,30 horas.
Emocionado por contar con la presencia del recientemente nombrado cardenal por el Papa Francisco de nuevo en la conocida como la iglesia de los pobres de Madrid, el Padre Ángel, presidente de la ONG Mensajeros de la Paz, ha organizado una pequeña merienda para después de la ceremonia. «Habrá huesos de santos que van a donarnos las confiterías cercanas a San Antón», cuenta el Padre Ángel. Explica que el objetivo de la ceremonia es recordar «a los que nadie recuerda, porque a menudo mueren solos, tirados en la calle, sin nadie que se preocupe por ellos».
La iglesia de San Antón invita a participar en la celebración, rezando por los difuntos de cada uno -y escribiendo en un papel sus nombres-, pero sobre todo teniendo en cuenta a los que continúan yéndose en soledad, porque padecen diariamente situación de abandono y exclusión del sistema.
«El cardenal Osoro, que tiene mañana miles de celebraciones a las que asistir, quiere terminar el día con los sintecho de San Antón, como ha hecho en otras ocasiones, viniendo a charlar con ellos y repartir la cena», cuenta el Padre Ángel. «Es una delicia contar con un cardenal que se acuerda de los desprotegidos y nos recuerda a los demás que todos merecemos morir con dignidad y que alguien nos dedique un pensamiento cuando ya no estamos», concluye el sacerdote, fundador de Mensajeros de la Paz.