El público ha respondido con aplausos y palabras de ánimo dirigidas a los nazarenos de La Macarena que, en un momento de nervios provocado por la incertidumbre generada en plena calle Sierpes, no han podido contener el llanto
La tradicional y espectacular Madrugá de la Semana Santa sevillana ha registrado varios conatos de estampida que han interrumpido durante un breve período de tiempo algunas de las cofradías. Ocho personas han sido detenidas por desorden público, dar golpes al suelo y gritar con amenazas en el entorno de la calle Marqués de Paradas de Sevilla.
Allí se han registrado carreras entre el público que han afectado a los cortejos procesionales. Los detenidos son delincuentes comunes con antecedentes, según ha informado el Ayuntamiento de Sevilla.
El comunicado oficial agrega que aún se están analizando completamente todos los datos disponibles para determinar los motivos de lo ocurrido, pero concluye que «no hay causas de alarma».
Las carreras se han producido en varios lugares por los que discurren las procesiones, las más populares de Sevilla, poco después de las cuatro de la madrugada.
Si bien no se ha registrado ningún herido, las «carreras», que han tenido lugar en puntos próximos a la Carrera Oficial, principalmente al paso de la Hermandad de la Macarena en la calle Sierpes y en la zona de Salvador -si bien esta no forma parte de la Carrera Oficial-, han provocado cierta sensación de pánico entre los nazarenos y los asistentes.
También se ha provocado otra pequeña estampida en un punto cercano a la Hermandad de Los Gitanos en su salida.
Las autoridades han señalado que éstas han sido una reacción por miedo, si bien han insistido en que no tienen origen en ninguna amenaza real.
Una de sus consecuencias ha sido la ruptura de un cortejo de la Esperanza de Triana, algunos de cuyos músicos han informado en las redes sociales de que no podían continuar hasta el final por los daños sufridos.
El servicio de Emergencias de Sevilla y el propio Ayuntamiento han hecho un llamamiento a la calma y, siguiendo sus indicaciones, la gente ha empezado a recuperar la tranquilidad y las cofradías, a reordenarse.
Según testigos presenciales, el público ha respondido con aplausos y palabras de ánimo dirigidas a los nazarenos de La Macarena que, en un momento de nervios provocado por la incertidumbre generada en plena calle Sierpes, no han podido contener el llanto.
Emergencias ha agradecido a los asistentes «por seguir las instrucciones de la Policía» y mantener la calma y así poder permitir que la jornada continúe. «La Madrugá sigue su marcha», ha apuntado.
(RD/Agencias)