Según fuentes de la prisión, Urdangarin está "tranquilo", pero para consolarse se ha llevado un rosario y una imagen de la virgen Blanca, la patrona de Vitoria
Iñaki Urdangarin ingresó el pasado lunes en la cárcel abulense de Brieva, para cumplir cinco años y diez meses de condena por el caso ‘Noos’. Según afirma la revista Lecturas, el cuñado de Felipe VI ha busado refugio en la fe en sus primeras horas en prisión.
Así, lo primero que Urdangarín dijo al poner un pie en la cárcel fue: «¿Cuándo hay servicios religiosos?«. Entre los motivos por los que el ex duque de Palma habría elegido es prisión estaría que el jesuita José María Fernández Martos ofrece servicio religioso todos los domingos y puede ser avisado en cualquier momento para consolar y tratar a las reclusas.
Según fuentes de la prisión, Urdangarin está «tranquilo», pero para consolarse se ha llevado un rosario y una imagen de la virgen Blanca, la patrona de Vitoria. El reo deberá romper con la monotonía y llenar las horas del día con otra cosa que no el rezo. A Urdangarin le queda un mes por delante de Mundial de Rusia, que según las mismas fuentes esta siguiendo por televisión desde su celda.
El marido de la infanta Cristina es el único ocupante del módulo para presos de ese centro, vigilado por un solo funcionario. Hace poco dicho módulo fue reformado. Se hicieron obras de acondicionamiento, con mejora de las instalaciones de calefacción y refrigeración para combatir las altas y bajas temperaturas de la zona según la estación.
(RD/Agencias)
Cárcel de Brieva