"Quien nos entregó la custodia del cuerpo de Franco fue el Rey y, por tanto, esta cuestión depende de la Jefatura de Estado", afirmó Cantera, según fuentes consultadas por RD
(Jesús Bastante).- La pelota sigue en su tejado. El prior del Valle de los Caídos, Santiago Cantera, continúa negándose a la exhumación de los restos del dictador Francisco Franco, tal y como pretende el Gobierno. En su negativa, Cantera esgrime un poder notarial de los siete nietos del Generalísimo, en el que aseguran no querer hacerse cargo del cadáver.
Sin embargo, después de unos días de retiro en Solesmes, la abadía francesa de la que depende la comunidad de Cuelgamuros, el religioso ha comentado a sus íntimos una posible solución, ante la que no podría evitar la salida de Franco del Valle: que la orden provenga de Felipe VI.
«Quien nos entregó la custodia del cuerpo de Franco fue el Rey y, por tanto, esta cuestión depende de la Jefatura de Estado», afirmó Cantera, según fuentes consultadas por RD, que añaden que tanto el abad de Solesmes, Philip Dupont, como los abades de los monasterios de Leyre y Silos, han pedido al religioso que contribuya a desbloquear la situación, antes de que el caso pueda llegar a Roma y sean entonces las autoridades vaticanas las que tengan que intervenir. La Santa Sede ya ha dejado claro que éste es un tema que compete a las autoridades españolas.
Sin embargo, un Real Decreto Ley (la fórmula por la que parece decantarse el Gobierno), que requiera la firma del Jefe de Estado, invalidaría cualquier oposición de la Abadía, que habría que devolver los restos del dictador a quien originariamente se los entregó para su custodia.
«La Iglesia tiene la custodia (…). Lo único que podríamos hacer es impedir una extracción ilegal del cuerpo. Pero si el Rey determina que sí, no nos podemos oponer», confesó recientemente Cantera, quien recordó que no fue decisión de la comunidad benedictina traer los restos, ni tampoco está en sus manos la decisión de sacarlos.
La mayor preocupación para el prior, además de la división existente en la comunidad entre quienes se niegan a la salida de los restos del dictador y quienes creen que éste es un tema político y familiar, y en ningún caso religioso, es la posición de la familia Franco, con la que él se ha identificado plenamente. De hecho, como ya publicó RD, Cantera formó parte de las candidaturas de Falange tanto en las generales de 1993 como en las europeas de 1994.
Y es que, si los nietos del dictador continúan negándose a hacerse cargo de sus restos (para enterrarlos, junto a Carmen Polo, en el cementerio de Mingorrubio, junto al Pardo), podría darse el caso extremo de que Franco terminara siendo enterrado en una fosa común, la del cementerio de La Almudena, una situación que nadie desea.
