Estas páginas nos llevarán al interior de castillos y abadías, salas de consejo y prisiones, para narrar las vicisitudes de estos caballeros de Cristo en sus últimos días
Lo mismo el título en general, como todas y cada una de las palabras que lo componen, ya de entrada y sin más discusiones, son atractivos convincentes para que el libro llame la atención y el número de sus lectores esté asegurado.
«Últimos», «días», templarios», «misterios desvelados», «archivo secreto» y «Vaticano», levantarán necesariamente polvaredas de interés bibliográfico, en unos tiempos en los que da la impresión de que la lectura en papel no parece serles propicios ni a los números ni a las apreciaciones futuras.
Mario del Bello, «redactor de la revista «Cittá Nuova», docente de literatura y de historia, periodista, crítico de arte, cine y música, que se distingue por buscar, rebuscar e indagar «la verdad de una historia envuelta en leyendas de siglos», completa el interés que suscita este nuevo libro de la editorial «CN» -«Ciudad Nueva»- Su colección «Misterios desvelados» se enriquece con títulos del mismo autor, tan apasionantes como «El secreto de Pío XII,» «Los Borgia» y «Lutero».
El éxito está asegurado, poco más que con descubrir «que en el final de los Templarios intervienen los principales actores del siglo XIV en Europa como Felipe IV de Francia, Jaime II de Aragón, los papas Bonifacio VIII y Clemente V, Guillermo de Nogaret…Con ellos concluyen doscientos años de gloria y de dolor, heroísmos y mezquindades. Estas páginas nos llevarán al interior de castillos y abadías, salas de consejo y prisiones, para narrar las vicisitudes de estos caballeros de Cristo en sus últimos días…»
Del Archivo Secreto del Vaticano se asevera que «más de mil años de historia se hallan en los 85 km. de sus anaqueles, que desde hace 400 años está al servicio de la Santa Sede, que es uno de los centros de investigación histórica más importantes y célebres de mundo, cofre de secretos incomparables, con millones de legajos y pergaminos a disposición de eruditos de cualquier nacionalidad y credo».
Dado que estos misteriosos, potentados y, para algunos, herejes, Caballeros de la Sagrada Orden del Templo, también se asentaron en España y libraron batallas, por lo que sus pasos se pueden seguir todavía, por caminos, fortalezas, castillos, templos e iglesias, la cita en este libro sea parca, sí que es suficiente como para que en no pocos lectores surja el deseo de que, desveladas y trazadas un día sus rutas, el recorrido por las mismas llegue a ser fomentado por apasionados «peregrinos» de estas ofertas turísticas . Las «Rutas Templarias» por las diversas Comunidades Autónomas de España, y por Portugal, son otros tantos «tesoros escondidos».
Lo son también, si doctamente ilustrados acerca de los hechos, gestas y hazañas e intenciones de estos Caballeros que fundaron y pertenecieron a tal Orden, vivieron y presintieron su desaparición tan sangrante -la torre «Sangrienta es llamada la del castillo de Jerez de los Caballeros en Extremadura-, les ha de resultar fácil la comparación con Órdenes, movimientos piadosos cristianos, que de alguna manera luchan -así, luchan- por hacer perdurables todas -o algunas- de las ideas a las que consagran sus ideales, armas y dineros sus antecesores en la Edad Media, salvaguardados con bendiciones pontificias e indulgencias plenarias .
La leyenda de los Templarios tiene una larga historia, también cinematográfica, con remembranzas al tratado «De culta philosophía», de Cornelio Agripa (s.XVI). Mientras que en el mismo unos incluyen a los Templarios entre las sectas dedicadas a la brujería, asegurando que fue uno de los libros de magia más leído en todos los tiempos y hacen aparecer a estos Caballeros dedicados al infanticidio y a las orgías, otros colocan sus nombres entre las víctimas de las injusticias de los soberanos, a instancias de los mismos Papas.
ORDENES MILITARES
Las órdenes religiosas guerreras, también conocidas como órdenes militares, jugaron un papel significativo durante la Edad Media en la defensa de territorios cristianos y en la participación en las Cruzadas. Aquí tienes algunas curiosidades sobre estas órdenes:
- Los Caballeros Hospitalarios: Originalmente conocidos como la Orden de los Caballeros Hospitalarios de San Juan de Jerusalén, Rodas y Malta, comenzaron como una orden dedicada a brindar atención médica a los peregrinos. Con el tiempo, se convirtieron en una orden militar.
- La Orden Teutónica: Fundada durante las Cruzadas en el siglo XII, la Orden Teutónica inicialmente tenía un propósito hospitalario, pero más tarde se convirtió en una orden militar dedicada a la defensa de la cristiandad y a la conversión de paganos en Europa del Este.
- Los Templarios y la Banca: Se especula que los Caballeros Templarios jugaron un papel temprano en el desarrollo de servicios bancarios. Dado que los Templarios poseían gran cantidad de tierras y tesoros, se dice que ofrecieron servicios de depósito y préstamos a viajeros.
- Órdenes Femeninas: Aunque las órdenes religiosas guerreras eran predominantemente masculinas, existían órdenes femeninas, como las Damas Hospitalarias. Estas mujeres proporcionaban atención médica y apoyo a los caballeros y peregrinos.
- Juramento de los Templarios: Los Templarios realizaban un juramento de lealtad que incluía la promesa de vivir en pobreza, castidad y obediencia. Este juramento era una característica distintiva de la orden.
- Fortificaciones Impresionantes: Las órdenes militares construyeron impresionantes fortalezas y castillos en Tierra Santa y en Europa. Estas estructuras eran tanto defensivas como simbólicas de la presencia cristiana en la región.
- El Cisma de Aviñón: Durante el Cisma de Aviñón en el siglo XIV, cuando hubo dos papas rivales, los Caballeros Hospitalarios y los Caballeros Templarios se dividieron en sus lealtades, sirviendo a diferentes papas.
- Conversión y Misión: Algunas órdenes tenían como objetivo principal la conversión de no cristianos. Los Caballeros Teutónicos, por ejemplo, se embarcaron en campañas para cristianizar a las poblaciones paganas en Europa del Este.
- Declive de las Órdenes Militares: A medida que la necesidad de las Cruzadas disminuyó y las circunstancias políticas cambiaron, las órdenes militares perdieron su influencia. Muchas fueron disueltas o transformadas, y sus bienes fueron redistribuidos.
- Influencia en la Arquitectura: La arquitectura de las órdenes militares dejó una marca duradera. Los castillos y fortificaciones construidos por estas órdenes son conocidos por su solidez y diseño estratégico.