Necesitamos de vuestras oraciones. Es la fuerza que mantiene nuestra esperanza en que esto se resolverá
(Juan José Aguirre, obispo de Bangassou).- Han atacado una misión a 75 km de Bangassou llamada Gambo. Han degollado a varios hombres y niños. Todo está muy inquieto. Los jóvenes musulmanes no escuchan a nadie y quieren pelear y se sientan justo delante de la catedral, para que nadie pase.
Llevamos tres domingos sin abrir la catedral pues nadie quiere venir aquí. El domingo voy al Congo a decir la misa, enfrente de Bangassou, en donde hay 10.000 personas desplazadas…
No tenemos confianza en los soldados marroquíes. En Gambo llegaron los antibalaka y echaron a los Seleka el domingo, pero el lunes entró la Minusca egipcia y echaron a los antibalakas, con lo que los Selekas volvieron y cortaron una decena de gargantas. Lo que ha pasado en Gambo es muy grave y tendrá mucho eco en Bangassou.
Tengo a tres curas aquí conmigo, como mi guardia pretoriana; ahora estamos todos con los móviles. Los otros han escapado a Tokoyo para coger un poco de aire, otro se ha ido al Congo, otros se han quedado en las misiones al pie del cañón. Algunas monjas se han ido a España a hacer ejercicios en Teruel, otra al Congo.
Han saqueado sus casas, otras han adelantado vacaciones en Perú…
He llamado a los carpinteros de la misión (vamos a recogerlos en coche) para que tapien todas las puertas de la zona de las monjas.
El camión de la diócesis está bloqueado en Bema. Allí la gente ha huido. Solo quedan Selekas pero van a llegar los antibalakas.
Estoy hablando con Yovane (el misionero chileno que dirige la mision) por Whatsapp porque está muy inquieto. Esta con él mi chofer Barthélemy, un carpintero de Bangassou, el jefe de los albañiles y algunos más.
Están muy preocupados y yo puedo hacer poco más que rezar… Habían ido a terminar de construir la iglesia de Bema.
Necesitamos de vuestras oraciones. Es la fuerza que mantiene nuestra esperanza en que esto se resolverá.