La Declaración de Madrid de la Conferencia Mundial para el Diálogo

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«Los mensajes divinos rechazan el extremismo, el fanatismo y el terrorismo»

RD, Viernes, 18 de julio 2008

Los seguidores de todas las religiones y las culturas del mundo, así como los pensadores e investigadores participantes en la Conferencia Mundial para el Diálogo, que fue convocada por el Custodio de las Dos Sagradas Mezquitas, el rey Abdullah Bin Abdulaziz Al Saúd, rey de Arabia Saudí, y organizada por la Liga del Mundo Islámico en Madrid del 16 al 18 de julio de 2008; expresan su profundo reconocimiento y gratitud al Custodio de las Dos Sagradas Mezquitas, el Rey Abdullah bin Abdulaziz Al Saúd, por patrocinar la esta Conferencia y haberla inaugurado. Asimismo, acogen con aprecio los principios que les ha lanzado en su discurso que los han considerado como un documento principal de la Conferencia.

Por otra parte, los participantes expresan su gratitud a Su Majestad el rey Juan Carlos I, por haber participado en la Conferencia con un discurso orientativo y de bienvenida, al Excmo. Don José Luis Rodríguez Zapatero por haber participado en el acto inaugural, y por sus esfuerzos para el diálgo entre las civilizaciones, y al gobierno español por haber acogido este encuentro en España que tiene un rico legado de convivencia entre los seguidores de las diferentes religiones contribuyendo con ello a la civilización humana.

Los participantes recuerdan los propósitos de la Carta de las Naciones Unidas que insta a desplegar esfuerzos conjuntos para consolidar las relaciones internacionales, conseguir la comunidad humana ejemplar, profundizar el diálogo, e hacer hincapié en él como modelo cultural de cooperación.

Los participantes recuerdan la Declaración de la Asamblea General de Naciones Unidas en 1994 que llama a los principios de tolerancia, a promover una cultura de paz, y a proclamar el 1995 Año de la Tolerancia y el 2001 Año del Diálogo entre Civilizaciones.

Los participantes valoran positivamente el Comunicado de La Meca emitido por el Congreso Islámico Mundial que fue convocado por el Custodio de las Dos Sagradas Mezquitas, el rey Abdullah Bin Abdulaziz Al Saúd, y organizado por la Liga del Mundo Islámico en 2008.

Partiendo del hecho de que los seguidores de las diferentes religiones y culturas están de acuerdo en torno al valor del diálogo como el mejor camino para el entendimiento y la cooperación mutua en las relaciones humanas y la convivencia pacífica entre las naciones, los participantes afirman los siguientes principios:

1. El origen único de la raza humana, y la igualdad de la humanidad, sus diferentes colores, razas y culturas.

2. La naturaleza humana es amar el bien, odiar el mal, buscar la justicia, y huir de la injusticia. Asimismo, la naturaleza humana conduce al hombre a la misericordia, y le empuja a la búsqueda de la certeza y la fe.

3. La diversidad cultural entre los pueblos es un signo de la divinidad de Dios, y es un motivo del progreso humano y de su prosperidad.

4. Los mensajes divinos tienen como objetivo llevar a la práctica la obediencia de la gente a su Creador, conseguir la felicidad, la justicia, la seguridad y la paz para todas las personas, y busca fortalecer el entendimiento mutuo y la convivencia entre los pueblos, a pesar de sus diferentes orígenes, colores, e idiomas, invita a difundir la virtud siguiendo la mejor manera, y rechaza el extremismo, el fanatismo y el terrorismo.

5. El respeto de los mensajes divinos, de su categoría, y criminalizar la utilización de la religión para incitar a la discriminación racial.

6. La paz, el respeto de los compromisos, de las especificidades de los pueblos y su derecho a la seguridad, la libertad y la autodeterminación, es la base de la relación entre las personas. La consecución de esto es uno de los grandes objetivos de las religiones y cualquier cultura humana.

7. La importancia de la religión y los nobles valores, el retorno de la gente a su Creador para la lucha contra la delincuencia, la corrupción, las drogas y el terrorismo, mantener la consolidación de la familia y la protección de las sociedades de la desviación.

8. La familia es el cimiento de la sociedad y su piedra angular. Su protección es la base de cualquier sociedad segura y estable.

9. El diálogo es una necesidad de la vida, es el medio más importante para conocimiento mutuo, la cooperación, el intercambio de intereses, y la consecución de la verdad que contribuye a la felicidad humana.

10. Salvaguardar el medio ambiente y la naturaleza del globo y protegerlo de de la contaminación y los peligros ambientales que lo amenazan, es un objetivo fundamental compartido por todas las religiones y culturas.

Y para lograr los principios anteriores, la conferencia analizó el desarrollo del diálogo y sus obstáculos, teniendo presente los desastres naturales que asolaron la humanidad en el siglo XX, consciente de que el terrorismo es uno de los más importantes obstáculos en el desarrollo del diálogo y la convivencia, y es un fenómeno global que requiere esfuerzos internacionales para hacerle frente, con un espíritu de seriedad, responsabilidad y equidad, a través de un acuerdo sobre la definición del terrorismo, trata sus causas, y logra la justicia y la estabilidad en el mundo.

En consecuencia, la Conferencia recomienda lo siguiente:

1. Luchar contra las teorías que abogan por el inevitable choque entre las civilizaciones y las culturas, y advertir del peligro de las campañas que buscan profundizar la discordia y socavar la paz y la convivencia.

2. Fortalecer los valores humanos comunes, cooperar en su difusión en las sociedades, y abordar los problemas que impiden esto.

3. Fomentar el diálogo y promover una cultura de tolerancia y comprensión, que sirva de marco para las relaciones internacionales, mediante las conferencias y simposios, así como para mejorar los programas culturales, educativos y de información que conduzcan a ello.

4. Acordar un pacto mundial para el diálogo entre religiones y culturas, que consagra los más altos valores y principios éticos, que representan el denominador común entre los adeptos de las religiones y las culturas humanas, para promover la estabilidad y la prosperidad de los seres humanos.

5. Obrar para emitir un documento por parte las organizaciones internacionales, tanto oficiales como cívicas, que aboga por el respeto de las religiones y sus símbolos, no atentar contra ellas, y criminalizar los que cometen tales hechos. Para lograr los objetivos buscados por el Congreso, los participantes convinieron adoptar los siguientes medios:

1. Formación de un grupo de trabajo para estudiar los problemas que obstaculizan el diálogo, y evitan que se alcancen los resultados deseados, y preparar estudios que contengan las perspectivas para resolver estas problemáticas y coordinar entre las instituciones mundiales para el diálogo.

2. La cooperación entre las instituciones religiosas, culturales, educativas y de información para consagrar los nobles valores morales y promover las buenas prácticas sociales, para hacer frente al libertinaje y a la decadencia y la desintegración de la familia, y los diferentes vicios.

3. La organización conjunta de encuentros y congresos, llevar a cabo investigaciones, preparar programas de información, utilizar Internet y los diversos medios de comunicación, para promover una cultura de diálogo, de entendimiento y convivencia pacífica.

4. Introducción de los temas del diálogo entre los seguidores de las religiones, civilizaciones y culturas en los foros juveniles, culturales, educativos y de información.

5. Invitar a la Asamblea General de Naciones Unidas a respaldar las conclusiones de esta conferencia, y aprovecharlas para impulsar el diálogo entre los seguidores de todas las religiones, civilizaciones y culturas, organizando una sesión especial para el diálogo.

Los participantes en la Conferencia, aspiran a que el Custodio de las Dos Sagradas Mezquitas obre para organizar dicha sesión lo más pronto posible y desearían participar en ella con una delegación elegida por la Liga del Mundo Islámico.

Los participantes, comprometidos con los principios y conceptos acordados en esta conferencia, subrayan la necesidad de mantener el diálogo abierto de forma periódica.

Los participantes expresan su agradecimiento y reconocimiento al Custodio de las Dos Sagradas Mezquitas el rey Abdullah Bin Abdulaziz Al Saúd por su invitación al diálogo mundial. Asimismo expresan su agradecimiento y reconocimiento a la Liga del Mundo Islámico y a las entidades que han colaborado con ella en la organización de la Conferencia, y alaban los permanentes esfuerzos de la Liga en los ámbitos del diálogo y la cooperación entre las naciones y los pueblos, con la esperanza de conseguir los fines humanos comunes a los cuales aspira la humanidad.