Las diócesis americanas se han visto obligadas a pagar millones de dólares como compensación a las víctimas, lo que las ha dejado en la ruina y en la necesidad de cerrar asociaciones caritativas y templos
(Isabel Gómez Acebo).- Pienso que las autoridades eclesiásticas creyeron, que no dando a conocer el problema de la pedofilia de sus clérigos, defendían a la institución. La solución que ofrecieron fue el traslado de los culpables, de parroquia en parroquia, con lo que facilitaban el incremento de sus víctimas. Aparte de que estaban cometiendo un delito, el hecho ha resultado enormemente dañino para la Iglesia Católica.
Todos sabemos que en Irlanda, donde el catolicismo fue uno de los pilares de la sociedad, la gente ha dado la espalda a la Iglesia. Algo semejante ha sucedido en algunas diócesis de los Estados Unidos y en otras naciones europeas. Gracias a Dios, España se ha salvado de la quema.
Para leer el artículo completo, pincha aquí: