Parece que los heteros viciosos no merecen recurrente y pública reprobación, mientras que los gais son enviados al infierno varias veces por semana
(César Luis Caro).- Sabemos que no es una enfermedad ni una disfunción, pero aún no conocemos los mecanismos responsables de la orientación de una persona hacia la gente de su mismo sexo. Unos elementales conocimientos de antropología revelan que el ser humano es un todo complejo, un ser construido en un proceso donde lo genético, lo biológico, lo psicológico, lo social y lo cultural interactúan, se retroalimentan y se constituyen mutuamente, entrelazados durante todo el desarrollo de nuestra existencia.
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