En 2008, la Rota ha emitido 192 casos de nulidad matrimonial
Benedicto XVI advirtió hoy a los jueces del Tribunal de la Rota que no deben ceder a «peticiones subjetivas» para declarar nulo un matrimonio «a cualquier coste», y pidió a los abogados que no defiendan causas que según sus conciencias son infundadas.
El Papa hizo estas afirmaciones en su discurso a los jueces, oficiales y colaboradores del Tribunal de Rota, encargado de validar los matrimonios católicos, a quienes recibió con motivo de la inauguración del Año Judicial en el Vaticano.
«Es necesario huir de los llamamientos pseudopastorales que colocan los problemas en un plano meramente horizontal, en lo que cuenta es satisfacer las peticiones subjetivas para alcanzar a cualquier coste la declaración de nulidad, con el objetivo de poder superar, entre otros, los obstáculos para recibir los sacramentos de la Eucaristía y la Penitencia», dijo el Papa.
El Obispo de Roma se refería a los casos de los fieles divorciados y vueltos a casar, que no pueden acceder a la Eucaristía.
El Papa teólogo afirmó que «el bien altísimo» de la readmisión a la Comunión Eucarística tras la reconciliación sacramental «exige» saber cuál es la verdadera situación canónica en la que se encuentran esas personas, ya que si el matrimonio era válido y se ha divorciado ese fiel no puede acercarse a la comunión.
Según el Papa, «sería un bien ficticio y una grave falta de justicia y de amor allanar el camino para que reciba el sacramento» en ese caso.
Benedicto XVI profundizó en su discurso en las relaciones entre la justicia, la caridad y la verdad y señaló que cada vez está más difundida la tendencia «que lleva a contraponer la justicia a la caridad, como si una excluyera a la otra».
Denunció que algunos retienen que la caridad pastoral «puede justificar cada paso» hacia la declaración de nulidad del vínculo matrimonial para ayudar a las personas que se encuentran en una situación matrimonial irregular.
El Papa subrayó que la justicia no puede ser confundida con «inhumana frialdad» y manifestó que todos los que trabajan en el campo del derecho tienen que guiarse por la justicia.
«Pienso en particular en los abogados, los cuales no sólo deben tener cuidado en el respeto de la verdad de las pruebas, sino que también deben evitar asumir como abogados defensores causas que, según sus conciencias, no se mantengan».
El Pontífice exhortó a las parejas separadas a volver juntas «siempre que se vea una esperanza de éxito» (de restablecer la convivencia de manera satisfactoria).(RD/Efe)