Lo encuentro siempre con las manos ocupadas, lleno de papeles, de correspondencia: para él es muy importante responder personalmente
El miércoles 5 de agosto se reanudarán las audiencias generales y terminará así el corto período sin compromisos públicos del Papa Francisco, tras su intenso viaje a América Latina.
En realidad, también en los días del verano boreal el Papa sigue «en el trabajo» sobre sus próximos compromisos, comenzando por el viaje a Cuba y Estados Unidos.
«Los pasa con mucha serenidad y alegría», dijo a Radio Vaticana monseñor Guillermo Karcher, responsable del ceremonial pontificio y uno de los principales colaboradores de Francisco. «Yo lo veo siempre contento, todas las mañanas. Siempre trabajando, por otra parte, porque lo encuentro siempre con las manos ocupadas, lleno de papeles, de correspondencia: para él es muy importante responder personalmente», explicó.
«Pasa este período en comunicación con sus amigos, con la gente que le resulta importante. Aprovecha sobre todo porque tiene más tiempo a disposición y entonces se dedica a eso. A leer documentos y proyectos que le llegan para el futuro próximo», agregó.
Sobre la posibilidad de caminar en medio de la gente, una libertad que al pontífice le gustaría tener, Karcher confirmó que «la extraña. Él estaba muy acostumbrado a caminar, a estar entre la gente. Pienso en el verano argentino, en el mes de enero que es comparable con este julio con caluroso y pesado: él pasaba los días visitando los barrios pobres de Buenos Aires, compartiendo con la gente este período duro, de calor, también de sacrificio».
«Pero lo ofrece a Dios y lo vive como un momento que dar al Señor, en ofrenda», siempre «cerca de la gente que sufre a quien el calor les hace la vida imposible: pensemos en estas casas, donde no creemos siquiera que exista el ventilador«, concluyó Karcher. (RD/Agencias)