A 31 de diciembre de 2013, estaban confiados al IOR activos de clientes por un total de 5.900 millones de euros y un patrimonio neto de 720 millones de euros
El Papa Francisco se ha reunido este martes con el Consejo de Supervisión del Instituto para las Obras de Religión (IOR) y ha nombrado a Gian Franco Mammì como nuevo director, mientras se desarrollaba en el Vaticano la primera sesión del juicio por el caso conocido como ‘Vatileaks 2’, de robo y publicación de documentos reservados, en el que han comparecido los cinco imputados, entre los que se encuentra el sacerdote español Lucio Ángel Vallejo Balda.
Según ha informado la Santa Sede, el Pontífice se ha dirigido este martes sobre las 10,30 horas –coincidiendo con la hora del comienzo del proceso en el Tribunal del Vaticano– a la sede del IOR y ha mantenido un encuentro de unos 20 minutos con el Consejo de Superintendencia de este instituto.
Durante esta reunión, Francisco ha comunicado el nombramiento del nuevo director general del IOR, Gian Franco Mammì, que sustituirá a Rolando Marranci –que ocupaba este cargo desde noviembre de 2013–, y que será ayudado por Giulio Mattietti a la espera de la elección de un nuevo vicedirector.
Gian Franco Mammì, de 59 años, comenzó su carrera en el IOR en 1992 trabajando como cajero. En los últimos 23 años ha adquirido una amplia experiencia en diversos cargos directivos, asesorando a los clientes italianos y latinoamericanos del Instituto. También ha sido gerente de relaciones con el cliente y, posteriormente, jefe adjunto de la Oficina de Sucesiones y director de la Oficina de Compras.
El Instituto para las Obras de Religión (IOR) es una institución fundada el 27 de junio 1942 por decreto papal para servir a la Santa Sede y a sus clientes en la Iglesia Católica en todo el mundo. Sus orígenes se remontan a la Comisión de Causas Pías fundada en 1887 por el Papa León XIII.
El propósito del IOR, tal como establece su estatuto, modificado por el Papa Juan Pablo II en 1990, es «proveer a la custodia y administración de los bienes transferidos o asignados al Instituto por las personas físicas o jurídicas y destinados a obras de religión y caridad». El Instituto podrá aceptar bienes por parte de entes y personas de la Santa Sede y del Estado de la Ciudad del Vaticano.
A 31 de diciembre de 2013, estaban confiados al IOR activos de clientes por un total de 5.900 millones de euros y un patrimonio neto de 720 millones de euros. El IOR tiene sede exclusivamente en el territorio soberano del Estado de la Ciudad del Vaticano. El Instituto está sujeto a la vigilancia y regulación de la Autoridad de Información Financiera (AIF), el organismo de control financiero del Estado de la Ciudad del Vaticano.
(RD/Ep)