Esta grave crisis sólo se solucionará con la renuncia del obispo Barros al ejercicio pastoral, porque desde el 21 de marzo de 2015 ha habido fuertes abusos de poder de su parte hacia laicos y sacerdotes
(Reflexión y Liberación).- Hoy, sábado 9 de enero de 2016, Laicos y Laicas de la Diócesis de Osorno, hemos decidido hacer una ocupación litúrgica de nuestra Catedral, dada la grave e insostenible crisis que afecta a la Iglesia de Osorno desde el nombramiento el 10 enero de 2015 de Don Juan de la Cruz Barros Madrid como Obispo. Por tanto, declaramos:
1. Somos católicos contrarios al ejercicio pastoral del Obispo Barros, no sólo por su formación íntima con el condenado sacerdote Fernando Karadima por lo cual se entiende su modo de proceder poco pastoral, o por las fundadas acusaciones de encubrirle sus delitos de abusos a menores de lo cual no ha podido demostrar inocencia, o haber sido parte de una secta como lo fue la Pía Unión Sacerdotal. A todo eso, hay que agregar que nuestra historia pastoral diocesana nos convoca a hacer prevalecer el bien mayor que es la Diócesis de Osorno, lo cual, quien debe ser pastor, ha demostrado no importarle.
2. Sabemos que nuestra Diócesis fue negociada para que el Sr. Barros llegue a ejercer como Obispo. En esta negociación participaron el Nuncio Apostólico Ivo Scapolo y altos personeros del Gobierno de Chile. Ante esta situación, la Conferencia Episcopal de Chile (CECh) guarda público silencio desatendiendo un problema que fue generado fuera de Osorno y del cual nosotros no somos responsables.
3. Solicitamos un diálogo fraterno, sincero y despojado de poder con el Nuncio Apostólico y los Obispos de la Conferencia Episcopal de Chile (CECh) lo antes posible, para resolver la grave crisis pastoral existente. Como Organización de Laicos y Laicas creemos que sólo un dialogo basado en la verdad nos permitirá avanzar como Iglesia. En esta reunión tienen que estar representados Laicos, Diáconos permanentes, Sacerdotes y Religiosas, puesto que todos juntos formamos Iglesia Pueblo de Dios en Osorno.
4. Reafirmamos nuevamente que esta grave crisis sólo se solucionará con la renuncia del obispo Barros al ejercicio pastoral, porque desde el 21 de marzo de 2015 ha habido fuertes abusos de poder de su parte hacia laicos y sacerdotes de la diócesis, con constantes amedrentamientos y despidos injustificados a Laicos que participan en nuestra Organización.
5. Nos duele profundamente la división existente en el pueblo de Dios de Osorno: Amigos, conocidos, familiares, sacerdotes, religiosas y diáconos divididos a causa de las posturas frente a la presencia del Obispo Barros. Queremos una diócesis unida, servicial, operante y no una paralizada por la presencia del obispo.
6. Porque somos parte del pueblo de Dios, a pesar del sufrimiento que nos provoca no ser escuchados y abandonados, manifestamos nuevamente nuestra opción por el diálogo.
En este año jubilar de la misericordia, nos preguntamos ¿cuándo misericordia para Osorno? Confiamos nuestra vida y acciones a Santa María, Señora de Osorno; a San Mateo Apóstol, patrono de Ciudad y Diócesis; y al Venerable Siervo de Dios Mons. Francisco Valdés, primer obispo de Osorno y en camino a ser declarado santo.