"El sexto sentido" es el undécimo álbum de la mexicana Thalia, en el que la cantante, actriz y empresaria abre su "alma" y enseña "los tatuajes" de su vida. Con letras "eróticas y románticas" y con una música "muy pasional e intensa", la artista pretende difundir su "mensaje positivo y alentador".

Después de haber vendido diez millones de discos por todo el mundo en doce años de carrera musical, Thalia edita un nuevo álbum en el que cuenta "historias al oído" y donde "es compañera de vida de todas las personas" que la escuchan, dijo la cantante a EFE.

La artista mexicana, que regresará a España en el verano de 2006 con la gira de "El sexto sentido", reconoce que le encanta "experimentar"; por eso su estilo va "desde el rock alternativo, a la salsa, el merengue, el rap, el R&B, el dance o el hip-hop". En su nuevo disco, conjuga la "fusión de la nueva música con base rock, con dance o con impresionantes baladas".

El primer sencillo, "Amar sin ser amado", es un claro ejemplo del mensaje positivo que pretende transmitir a sus seguidores. En este y otros temas Thalia quiere "inspirarles y acompañarles en el cuento de la vida, alentarles desde la paz, la unión y el amor y decirles que se sacudan el polvo y sigan adelante".

Cantando al "amor y desde la experiencia, éste es un disco "vivencial" y personal a la vez que colectivo, porque todos se van a identificar con alguna canción", explica la artista.

"You know he never loved you", "Seduction" y "A dream for two" son las versiones en inglés de otras tantas canciones del álbum, compuesto por quince cortes. Este nuevo trabajo incluye además una reedición de su tema "Amor prohibido".

"Olvídame", "24.000 besos", "No puedo vivir sin ti", "Loca", "Empezar de 0" o "Un alma sentenciada" son otros de los temas en los que la artista funde ritmos muy movidos y baladas.

Este álbum tiene para Thalía un "halo universal", ya que se grabó en diferentes puntos del continente americano. "La percusión en Brasil, las cuerdas en Argentina, las bases en Miami, las voces en Nueva York y las mezclas en Puerto Rico", aclara.

Inspirada por todo lo que le acerque y una "a la naturaleza", Thalia encuentra la inspiración en sus escapadas a caballo por el bosque, así como en deportes como el alpinismo.

De una larga carrera como actriz, cantante y ahora también empresaria -que le ha aportado muchas satisfacciones y también momentos duros- Thalia destaca "el amor y el cariño del público" como lo más gratificante. Sin embargo, lo más duro fue el "cansancio crónico" que sufrió después de grabar en 1998 una de sus telenovelas, Rosalinda, que le hizo estar "un año en la cama".

"Aquella etapa me hizo retomar mi vida y dejar de ser adicta al trabajo", por eso ahora conjuga lo profesional con "el vivir".

Desde principios de los noventa, cuando la mexicana presentó su primer disco "En Extasis", ha editado otros álbumes de éxito como "Amor a la mexicana" (1997) o "Arrasando" (2000) -grabado con Emilio Estefan-.

Además, ha sido actriz de multitud de telenovelas como "Las tres Marías", la primera trilogía de este género y que, integrada por "María Mercedes", "Marimar" y "María la del barrio", se difundió en 180 países y la vieron millones de personas en todo el mundo.