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Schwartz: "Vichy, 1940" es mi mejor novela hecha desde la madurez

Agencia EFE, Viernes, 16 de junio 2006
El escritor Fernando Schwartz, ganador de la X edición del Premio Primavera de Novela 2006, ha presentado hoy en Pamplona su obra "Vichy, 1940" que, según dijo,"es mi mejor novela" porque "está hecha desde la "madurez" y el libro "que más me ha gustado escribir".

La novela de Fernando Schwartz, nacido "por casualidad" en Ginebra (Suiza) en 1937, diplomático de carrera, que le ha llevado a residir en Roma, Viena, Centroamérica, París, Londres, Nueva York, Kuwait o la Habana, está situada en los tiempos convulsos de la ocupación nazi en Francia, bajo el gobierno colaboracionista de Vichy.

Es un libro, a juicio del autor, "no tan divertido como otros que he escrito", pero tiene "una connotación que los anteriores no tenían", y al respecto incidió en que "cuando escribes desde la madurez, ya no estás relatando unas anécdotas o una historia, necesitas además imprimirles un cierto carácter moral".

Y no necesariamente, según agregó el escritor a Efe, "proporcionar culpas e inocencias pero sí darle un tratamiento profundamente moral a cuanto relatas, explicar las razones, ver las reacciones, y eso no se resuelve contando simplemente una historia", puntualizó.

En ese sentido, el escritor ganador asimismo del Premio Planeta 1996 con "El desencuentro", insistió en que "Vichy, 1940" "es mi mejor novela", tras lo que precisó que "no tiene tintes biográficos es más a nivel de madurez más autobiográfica", aunque reconoció que el protagonista que cuenta la historia "es un diplomático, y, claro, es un personaje que conozco bien".

Y es que, Fernando Schwartz desempeñó puestos diplomáticos en Costa Rica, Gran Bretaña, Estados Unidos, Alemania y Kuwait, entre otros lugares, para después dirigir el programa "Lo+Plus" durante más de nueve años, si bien ahora vive en Mallorca porque "encontré un día un sitio en la isla que me gustaba, y ahí me quedé".

El amor, según reconoció el escritor, está muy presente en su obra, y es que "en las relaciones humanas es muy importante, siempre hay amor", y porque en la guerra, en la que está enmarcado el libro, "siempre lo descarna, y los sentimientos es como si tuvieran arteriosclerosis, tienen unos términos nerviosos tan pelaos, que hace que la gente los tenga más florecientes".

Al respecto, prosiguió que el choque entre un diplomático relativamente indiferente, porque ya ha pasado de los 50 años, que "ve la vida desde un ángulo más destacado, más separado y mucho más escéptico" y el de una mujer mucho más joven, de 28 años, "que tienen muchas más fuerza vital, mucha menos sofisticación y por consiguiente es más pasional", el choque que surge "entre esos dos trenes es tremendo, entre otras cosas porque la joven al pobre diplomático lo desensilla y lo desarma".

Reiteró que "es la novela con la más contento estoy, a nivel histórico creo que es muy precisa, bien construida", aunque no se atrevió a calificarla de "redonda, porque eso tiene unas connotaciones de perfección"", pero sí la consideró "circular o esférica porque está terminada en sus propios términos, y, en ese sentido, me satisface".

"He descubierto lo fácil que es mezclar personajes inventados con los reales", recalcó el escritor, porque "no están alejados ninguno de ellos de la realidad o de la ficción, todo se entremezcla".

En cuanto a la parte histórica de la obra, Schwartz dijo que los protagonistas "crearon un mundo muy turbio", ya que cuando se arruinó la república francesa, "quedaron en pie los que realmente querían aprovecharse de ella", un mundo, a su juicio, "mísero, tan sucio, tan poco patriótico, un mundo terrible, y eso es lo que más me ha gustado sacar a la luz".

Aunque no quiso dar detalles de su próxima obra, Fernando Schwartz anunció que ya está trabajando en su próxima novela, también con tintes históricos, la cual, una vez más "hace referencia a un tema europeo", tras lo que concluyó que "soy consciente de que no sólo hay que escribir bien de historia sino también hay que escribir bien novela" y sentenció "eso no es nada fácil".