El periodista José María García ha dicho hoy que el Estudio General de Medios (EGM) es «un escándalo, una manipulación aberrante» y ha criticado la situación actual en los medios de comunicación españoles. García ha hecho estas declaraciones a los periodistas después de dar una charla en el curso de verano «Las nuevas fórmulas de comunicación: redes sociales y códigos no verbales» de la Universidad Rey Juan Carlos, en Aranjuez (Madrid).
Sobre los medios de comunicación españoles, ha dicho que en estos últimos ocho años ha habido «posiblemente el mayor periodo de pluralidad de la televisión pública» y ha cargado contra las radios, de las que ha dicho que «mayor decadencia es imposible».
«La radio ha pasado a ser un ‘jijí jajá’: tertulianos que saben de todo y no saben de nada y en cada sitio que van hablan de acuerdo a los intereses sagrados de ese centro mediático; los deportes son un cachondeo, los periodistas se convierten en forofos, en ultras… ¿Qué queda de la radio? ¿Por qué hemos luchado?», ha exclamado.
García ha añadido que las emisoras y los periódicos no son «una tienda de zapatos: no todo vale, no es el que más venda». «Durante muchísimos años -ha añadido- hemos creído que una noticia no lo era si no estaba debidamente contrastada. Ahora eso se ha cambiado por ‘no permitas que la realidad te estropee una noticia'».
Preguntado sobre las recientes críticas a la periodista de Telecinco Sara Carbonero, el veterano locutor ha opinado que «no es una brillante periodista», aunque «se desenvuelve más o menos bien» y que la culpa de los ataques la tienen sus compañeros. «Cuando le preguntaron -sus compañeros- la primera gilipollez tenía que haber cogido las maletas e irse. ¿Qué preguntas le han hecho a Sara?. ¡Había dos tíos haciendo una carrera de relevos a ver quién hablaba más! De tarde en tarde se acordaban de ella y le tenían que dar paso» con esas preguntas, ha considerado.
Sobre la situación económica y laboral en España, García les ha dicho a los alumnos presentes en su charla que se vayan del país si pueden, «porque la situación es tan dantesca que no es un problema de su conocimiento o de su interés, sino de la empresa para la que trabajas». «Contarles la verdad es muy crudo, pero mentirles es algo que no me permitiría nunca», ha destacado. Sobre las redes sociales ha reconocido su «servicio impagable a los jóvenes, a pesar de los peligros que tienen» y que «han abierto muchísimos ojos»